La Justicia anula parte del proyecto del Circuito del Motor de Tenerife
El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Santa Cruz de Tenerife ha anulado uno de los cuatro proyectos con los que el Cabildo de Tenerife dividió la polémica iniciativa del Circuito del Motor en Granadilla de Abona.
En un fallo fechado el pasado 20 de diciembre, la jueza estima el recurso de la Asociación Tinerfeña de Amigos de la Naturaleza (ATAN) y declara que la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de la iniciativa ha caducado, obligando a la Corporación tinerfeña, promotora de la actuación, a realizar una nueva evaluación de impacto ambiental.
La primera y única DIA del Circuito del Motor, una obra pública cuyo gasto asciende a más de 50 millones de euros, fue publicada en el Boletín Oficial de Canarias (BOC) el 30 de septiembre de 2011. En ella, queda establecido que la resolución caducará a los cinco años “si no se comienza la ejecución del proyecto”.
En todo este tiempo, no obstante, apenas ha habido movimientos de tierras y excavadoras en la zona de actuación, pero el Cabildo de Tenerife defiende que el 22 de agosto de 2016, es decir, apenas unos días antes de que la DIA caducara oficialmente, se suscribió el acta de comprobación de replanteo de la obra, “dando comienzo [a las mismas] al día siguiente”.
Entre esa fecha y enero de 2017, las actuaciones “se limitaron a la ejecución de movimientos y acopios de tierra relacionados con el trazado de la pista de velocidad y con los encauzamientos de los cauces”, relata la sentencia. Sin embargo, a partir de entonces no hubo más avances hasta el año 2022. En julio de 2020 también comenzó la ejecución del proyecto de acceso al futuro recinto, aunque no se aportan más detalles.
Basándose en estos hechos, la jueza señala que “no puede ser admisible” que una DIA publicada hace más de 13 años siga vigente “por el simple hecho de que durante un corto periodo de tiempo [agosto de 2016-enero de 2017] se hayan realizado actuaciones en el terreno, como si por esta intervención mínima pudiera obtenerse una Declaración de Impacto Ambiental sin plazo de caducidad”.
“No cabe entender que cuando la DIA se refiere al inicio de las obras, pueda admitirse la mera realización de unas primeras actuaciones para, después, dejarlas paralizadas indefinidamente”, continúa el fallo.
Conviene recordar en este punto que la Unidad de Apoyo de la Comisión Ambiental de Tenerife (CEAT) ya advirtió de la caducidad de la DIA del Circuito del Motor en noviembre de 2022, meses después de que el Cabildo comenzara a promover la obra de nuevo. En un informe jurídico, la CEAT aconsejó realizar una nueva evolución ambiental porque la válida por ese entonces “no puede tener una vigencia ad eternum”, esto es, para siempre. El Defensor del Pueblo ahondó en la misma línea este año.
La sentencia razona que lo que persigue una declaración de impacto ambiental para no aplicar la caducidad es “la ejecución del proyecto” y que el inicio de las obras sea “la primera fase a la culminación” de la iniciativa. De lo contrario, “frustraría los fines del procedimiento ambiental”, ya que tendrían que aplicarse “nuevos conocimientos y técnicas disponibles” en la unidad de actuación “más acorde con las nuevas exigencias ambientales”.
De hecho, ha pasado tanto tiempo desde la DIA del Circuito del Motor que han aparecido en la zona donde se proyecta dos especies de protección especial: Plantago asphodeliodes, un tipo de hierba conocida comúnmente como llantén fino o cola de ratoncillo, y Herniaria canariensis, un pequeño arbusto cuyo nombre común es milengrana tinerfeña. Ambas están incluidas en el Catálogo Canario de Especies Protegidas, en la categoría de protección especial.
El colectivo de arqueología social Imastanen también alertó recientemente que los nuevos trabajos podrían afectar a diferentes yacimientos arqueológicos.
Este es el primer fallo de los cuatro recursos contencioso-administrativos que presentó la organización ATAN contra la iniciativa, pues el Cabildo de Tenerife la dividió en cuatro actuaciones: proyecto de explanaciones e instalaciones para graderíos desmontables para el Parque Internacional del Motor de Tenerife; proyecto modificado nº 2 de la fase 2 del acceso norte al Complejo Deportivo Centro Insular del Motor de Tenerife; proyecto de adaptación del Parque Internacional del Motor de Tenerife al plan de defensas contra avenidas y proyecto modificado de la pista de velocidad en el Parque Internacional del Motor de Tenerife.
El colectivo ATAN ha celebrado la sentencia y recuerda que sus “argumentos” deben “tomarse en consideración” con respecto a los tres proyectos que aún quedan por dirimirse en los tribunales.
Para la organización ecologista, que siempre se ha mostrado en contra del Circuito del Motor de Tenerife, la isla está “en medio de una crisis medioambiental, con una terrible regresión de sus valores naturales (…) producto de las políticas públicas y privadas promovidas o amparadas, entre otras administraciones, por la institución insular”.
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