Guía breve de la ciudad de Jaén

Como en todas las ciudades con el pedigrí que sólo dan los siglos, por debajo de las baldosas de la calle duerme un mundo donde se mezclan piedras de todas las épocas, culturas y dioses. Un universo que, de vez en cuando, se vuelve a asomar al presente cuando se abre una zanja o se excava el terreno para hacer un aparcamiento. Es algo común en Andalucía. Y más aquí, donde se cruzan los caminos que llegan desde las llanuras castellanas, las costas mediterráneas, las rutas milenarias que bajan por el Guadalquivir y las que, en sentido contrario, suben a las montañas que sirvieron de refugio a las primeras mujeres y hombres que pusieron los pies por estos andurriales. Lugar de paso; lugar clave para entender España; lugar conflictivo en el que se batieron batallas que cambiaron el curso de la historia de la Humanidad. Casi nada.

En lo alto del cerro, altivo, se yergue el mejor testigo de esto que decimos. El Castillo de Santa Catalina (Dirección: Carretera del Neveral, 5; Tel: (+34) 953 12 07 33; Horario: del 20 de mayo al 15 de septiembre MS 10.00 – 14.00 y 15.30 – 21.00 D 10.00 – 15.00; del 16 de septiembre al 19 de mayo MS 10.00 – 14.00 y 15.30 – 19.00 D 10.00 – 15.00; E-mail: oficinaturismo@aytojaen.es) es lo que queda de un impresionante red de fortificaciones que convirtió a la ciudad de Jaén en la medina medieval mejor defendida del mundo. Y no es broma. Desde las alturas, la ciudad se recoge apretada en un mar de tejadillos separados por una red de ranuras de sombra que adelantan el laberinto con el que nos encontraremos. Sólo la mole de la catedral (si no miramos hacia los edificios modernos) y los campanarios de las iglesias interrumpe esta trama apretujada. Más allá de la ciudad olivos y montañas.

Pero estábamos hablando de lo que se esconde bajo las baldosas. Los Baños Árabes (Dirección: Plaza Santa Luisa de Marillac, sn; Tel: (+34) 953 248 068; Horario: MS 9.00 – 22.00 DyF 9.00 – 15.00; E-mail: ccbarabes@dipujaen.es) son uno de esos lugares donde el pasado se encuentra con el presente de forma espectacular. Los que saben de esto dicen que los mayores baños medievales que aún quedan en pie en España se construyeron en el siglo XI, en plena época Almohade. Arcos, bóvedas y galerías nos trasladan a una ciudad que no sólo fue importante desde el punto de vista militar; fue aquella ciudad de tiempo de ‘moros’ un lugar culto, refinado y sofisticado en comparación con la mitad cristiana de la España de aquellos tiempos. Un pequeño museo de arte naif y una muestra sobre los usos y costumbres de la Andalucía interior ocupan las enormes salas del Palacio de Villardompardo, construido sobre los antiguos baños musulmanes, pero lo que realmente sorprende al viajero inquieto es ver las salas, el vestíbulo, esas cupulillas abiertas en delicadas estrellas de luz, la fantástica combinación de arquitectura e ingenio de este lugar único en el que los antiguos dueños de la ciudad arreglaban sus negocios mientras se relajaban y aseaban entre nubes de vapor ardiente.

Jaén es una capital desconocida por el gran público. Y es una verdadera injusticia. La mayoría de los turistas pasan por la autovía camino de la costa sin darle una oportunidad a uno de los cascos históricos más interesantes de Andalucía. A los pies del Cerro de Santa Catalina, donde estuvimos antes para visitar el castillo, se acurruca la antigua Jayyān de los árabes; Y la Aurugi romana y visigoda; y la ciudad fenicia, que, a su vez, se construyó sobre el antiguo poblado íbero. Basta una visita al Museo de Jaén (Dirección: Paseo de la Estación, 29; Tel: (+34) 953 101 366; Consultar horario; E-mail: museojaen.ccd@juntadeandalucia.es) es imprescindible para comprender de manera integral esta superposición de culturas que se repite en todas las grandes ciudades de la región. La exposición alterna una completa colección arqueológica que repasa la historia de la ciudad desde la Prehistoria y una coqueta muestra de bellas artes.

Castillo, baños y museo. Resta la impresionante Catedral de la Asunción (Dirección: Plaza de Santa María, sn; Tel: (+34) 953 23 42 33; Consultar horario) para completar la lista de imprescindibles de una visita rápida a la capital del Santo Reino. El templo es una de las obras de referencia del Renacimiento en España y, sin duda alguna, uno de los edificios más hermosos del país. Como metáfora de la propia historia de la ciudad, la catedral se levantó sobre la antigua mezquita mayor de la ciudad que, seguramente, ocupó el lugar de algún lugar sacro anterior. La catedral jiennense es, sencillamente, impresionante. Si el exterior impacta por el volumen y la contundente armonía de sus formas, el interior es un alarde que reúne todas y cada una de las reglas del renacimiento dejando entrever, en algunos rincones, su pasado gótico. Un paseo por el Museo de Arte Sacro, más allá de los tesoros y obras de arte que exhibe, es una oportunidad para visitar las tripas de este edificio espectacular.

Con los deberes hechos, el viajero puede darse el gusto de caminar sin rumbo por las callejuelas que forman el casco histórico de la ciudad e ir descubriendo, al azar, las joyas que esconde este laberinto de apariencia humilde. El Arco del Consuelo (acceso a Calle Cerón) es la puerta de entrada de los antiguos zocos de la medina andalusí. En esta red de callejuelas se concentran la mayoría de edificios históricos, antiguos palacios, iglesias y conventos de la ciudad. También es el lugar donde se apelotonan tascas, tabernas y bares que conforman una de las mejores zonas para irse de cañas y tapas de España.

Una buena táctica de exploración es alternar una buena caña a cada hora u hora y media de exploración. Uno puede ver uno de los mejores artesonados mudéjares de España en el antiguo palacio que ahora ocupa la Casa de Cultura (Dirección: C/ Bernardo López sn; Tel: (+34) 953 19 04 55; Horario: LV 10.00 – 14.00 S 11.00 – 14.00) y tomarse una caña acompañada de una impresionante tapa. Después callejear buscando otras joyas del patrimonio local como la Iglesia de la Magdalena (Dirección: Plaza de la Magdalena sn; Tel: (+34) 953 190 031; Horario: MV 11.00 – 13.00 y 17.30 – 20.30 S 11.00 – 13.00 y 18.00 – 20.00 D 9.30 – 13.30) antigua mezquita que alterna restos de su pasado islámico (como su alminar reconvertido en campanario) con su delicada arquitectura gótica.

Enumerar los edificios en los que el viajero puede descubrir los secretos de Jaén sería convertir estas líneas en un listado tedioso. Baste decir que ‘el/la curioso/a’ tiene a su disposición la magnífica información que brinda el servicio turístico local (ver aquí listado de monumentos). Pero volvamos al subsuelo. Decíamos que bajo las calles de la ciudad se amontonan las otras ciudades que, antes de la que hoy existe, fueron. También hay huellas de su gloria pasada y de momentos trágicos. El Refugio Antiaéreo de Santiago (Dirección: Plaza de Santiago sn; Tel: (+34) 953 190 455; SDyF 11.00 – 14.00) es una de las escasas huellas de la Guerra Civil Española que quedan en una ciudad que fue una de las últimas ciudades republicanas en caer en manos de los franquistas. Esta instalación de defensa acoge una interesante muestra sobre la guerra en la ciudad.

TAPAS EN JAÉN

Cervecería La Quintana (C/ Federico de Mendizábal, 14; Tel: (+34) 953 087 017; E-mail: josdelrio@hotmail.es) Un local mítico centrado en los productos más tradicionales de la región. Buenas tapas y muchísima calidad. Altamente recomen dable.

Casa Gorrión (C/ Arco del Consuelo, 7; Tel: (+34) 953 232 000) Todo un clásico. Para muchos el bar de tapas con mayor solera de Jaén y con la ventaja de estar en el epicentro del centro histórico jiennense. Espectaculares el queso, los embutidos y el bacalao.

La Manchega (C/ Bernardo López, 8; el: (+34) 953232192) Otro de los imprescindibles de la ciudad. Tapas tradicionales y gusto por lo auténtico.

Panaceite (C/ Bernabé Soriano, 1; Tel: (+34)953 240 630; E-mail: admin@panaceite.com) Uno de los mejores bares de tapas de la ciudad. Embutidos de primerísima calidad a dos pasos de la catedral. ¡Los pinchos se salen!