Cantabria ha modificado el protocolo de rastreo y a partir de ahora indicará la realización de Prueba Diagnóstica de Infección Activa (PDIA) a contactos estrechos vulnerables -personas de mayores de 65 años, con factores de riesgo, inmunodeprimidos y no vacunados- y a quienes presenten sintomatología compatible con COVID-19. La prueba diagnóstica será una sola, el cuarto o quinto día desde la fecha del último contacto con el positivo.
Por su parte, los contactos no vulnerables o asintomáticos deberán hacer autoseguimiento, además de mantener comportamiento de bajo riesgo, según ha informado Sanidad. Seguirán siendo prioritarios los ámbitos sanitario y sociosanitario, en los que se indicará la realización de un test al total de los contactos estrechos identificados.
Este cambio en el protocolo se adopta ante el incremento de casos y contactos estrechos, y de acuerdo con el documento de Priorización de las actuaciones de prevención y control en situaciones de incremento acelerado de la transmisión comunitaria de SARS-CoV-2 adoptados el 5 de julio de 2021 por la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta, y adaptados por el grupo de Vigilancia Epidemiológica y Rastreo de la Dirección General de Salud Pública.