La 'Commonwealth hispana' de Revilla se desinfla: la intrahistoria del perdón de López Obrador
El presidente de México se ha colado en las últimas horas en la primera línea de la agenda mediática española después de que transcendiera la carta que ha enviado al rey Felipe VI instándole a pedir perdón por los abusos que los españoles cometieron contra los nativos durante la conquista de América. Desde que Andrés Manuel López Obrador visitara Cantabria hace un año y medio invitado por Revilla -antes de ser elegido presidente mexicano-, sus pasos se siguen con especial atención en esta comunidad autónoma.
Después de aquella visita a la localidad cántabra de Ampuero en la que nació y se crió el abuelo de 'AMLO', ambos mandatarios entablaron una especial relación de amistad que mantienen muy viva a pesar de los más de 9.000 km que los separan. Tal es así que Revilla fue uno de los privilegiados que asistió el pasado mes de diciembre a su toma de investidura invitado personalmente por el dirigente mexicano, que lo hospedó en su rancho junto al músico Silvio Rodríguez y al político británico Jeremy Corbyn.
De esta relación salió una idea, un proyecto común: celebrar un gran evento entre España y México que recreara una especie de 'Commonwealth hispana' en el año 2021, aprovechando la efeméride del quinto centenario de la llegada al país azteca del conquistador Hernán Cortés y la batalla de Tenochtitlan.
Ambos están entusiasmados con la idea de estrechar lazos entre los dos países y afianzar la cooperación, pero López Obrador puso una única condición: que España pidiera disculpas por las atrocidades que los conquistadores llevaron acabo en aquella época. Revilla entendía esa demanda como un acto de reconocimiento mutuo de los errores que se pudieran haber producido y creía que no habría problemas para cerrar amistosamente este capítulo de la historia, pero la carta del líder mexicano parece haber abierto una pequeña crisis diplomática.
La Moncloa y todos los partidos políticos, salvo Podemos, han cuestionado la reclamación y las formas de López Obrador y han rechazado que la Casa Real tenga que exculparse por algo que sucedió hace 500 años. También su “amigo” ha declinado tal demanda. “Reconducir eso hacia un punto y a parte y pedir disculpas por las cosas que se hayan podido cometer por ambos lados, ese sería el camino”, ha defendido el cántabro, que no está “de acuerdo” con “mandar una carta exigiendo”, como ha hecho el mexicano.
A su juicio, se trata de una “imposición inadmisible” y, aunque tiene “una muy buena relación” con 'AMLO', cree que “el enfoque no es el correcto”. “Yo creo que esto hay que limarlo y llegar a un acuerdo en que podamos mutuamente llegar a una reflexión de que en aquellos tiempos se hicieron cosas por ambas partes de las cuales no tenemos ninguna culpa los que vivimos ahora”, ha sostenido a preguntas de los periodistas.
De hecho, el jefe del Ejecutivo cántabro ha reconocido que le ha “sorprendido” el “método” de López Obrador “de plantearlo como una imposición”, y ha considerado “razonable” la respuesta que ha dado el Gobierno de España a su petición, que ha manifestado su “rechazo con toda la firmeza”.
El también líder del Partido Regionalista de Cantabria ha reconocido que “sí que ha habido tropelías en la Conquista, pero también ha habido gente extraordinaria que ha ido allí y ha aportado una cultura”. “No era precisamente aquella civilización de aztecas, de mexicas y demás un ejemplo de sociedad, donde se sacrificaba a los jóvenes, donde tenían unas teorías tremendas”, ha apuntado.
“Es como si yo ahora dijera (... que) los romanos llegaron en el año 29 antes de Cristo a Cantabria y acabaron con todos los cántabros. Pero hombre, yo la verdad, me duele decirlo, pero casi prefiero que nos hayan romanizado un poco y que seamos una región que tiene una lengua gracias a ellos”, ha reflexionado.
No obstante, Revilla ha abogado por “reconducir el tema de la hispanidad de una manera adecuada, porque el futuro y el mayor patrimonio de España es la lengua” y el país que “tiene que tirar del idioma es México, que son 157 millones”, ha concluido.
El referente británico y el español
Desde hace más de una década, Miguel Ángel Revilla insiste a menudo en sus intervenciones públicas en que España no aprovecha todo el potencial que le ofrece el hecho de que más de 400 millones de personas tengan como lengua materna el español, que es el segundo idioma más hablado en el mundo después del chino. De esa pequeña obsesión, nació el proyecto de la Fundación Comillas, con el que el presidente autonómico pretendía traer a miles de personas a Cantabria para aprender un idioma que sigue en expansión.
Aquella iniciativa no llegó nunca a cuajar y la institución académica vive hoy en día una situación económica muy delicada.
Tras conocer personalmente a López Obrador y entablar una estrecha amistad, el dirigente cántabro ha visto la oportunidad de relanzar esa idea a través de una especie de 'Commonwealth hispana', según él mismo lo ha descrito, y desde hace semanas un equipo de su confianza ya trabaja en este proyecto.
La Commonwealth es uno de los acontecimientos del año más importantes para los británicos. Desde 1973, el segundo lunes de marzo, se celebra en más de medio centenar de países que están integrados en esta mancomunidad formada en torno al antiguo Imperio Británico. El tipo de celebración ha cambiado con el paso de los años y, actualmente, se mezcla un servicio religioso en la Ababía de Wetminster con la presencia de la reina Isabel II con actividades lúdicas, como actuaciones musicales, y se iza la bandera en todos los edificios públicos. Cada año se elige un motivo o lema bajo el que transcurren toda la festividad.