Revilla: “El mayor problema que tiene Cantabria es el Gobierno de Rajoy”

Miguel Ángel Revilla ha cumplido el guion previsto. Su intervención en el Debate de Orientación Política de la Región, que se ha prolongado durante dos horas y veinticinco minutos, ha estado tan marcado por los reproches al Gobierno de Mariano Rajoy, al que ha considerado como “el mayor problema de Cantabria”, como por el balance de la actuación del bipartito PRC-PSOE en estos dos años de legislatura.

El presidente cántabro llevaba menos de cinco minutos en la tribuna parlamentaria cuando empezó a cargar contra el Ejecutivo del PP por los compromisos incumplidos. Y no paró hasta 45 minutos después. “Las cosas van moderadamente bien pese al hándicap del Gobierno central, que nos quiere estrangular porque a lo mejor no le caemos bien o porque el presidente es muy crítico”. Ahí comenzó Revilla el relato ya conocido, desatado hace unas semanas a raíz de que en los Presupuestos Generales del Estado de 2017 no incluyeran los 22 millones de euros prometidos para pagar las obras de Valdecilla.

En las cuentas pendientes de Rajoy se suman otros 22 millones para el hospital correspondientes al ejercicio 2016; otros 18 millones para la Fundación Comillas y las partidas para la implantación de la LOMCE y el desarrollo de la Ley de la Dependencia. “Si sumamos todo, son 89 millones de euros lo que nos debe”, ha apuntado Revilla, que también ha citado el incumplimiento de declarar a Torrelavega como Zona de Reindustrialización Preferente.

A ello, ha añadido el “recorte” del 2,6% en el montante total que recibirá la Comunidad este año procedente del Estado -“menos de 200 millones”- y que prosigue al descenso de 10,9% de 2016. “No pagan, no hacen obras y ahora te amenazan con cortarte el agua. Cuidado, cuidado”, ha incidido Revilla en alusión al último capítulo del enfrentamiento entre ambas administraciones, que tiene que ver con las restricciones impuestas por Madrid para captar agua del pantano del Ebro.

Incluso, ha puesto como “indicativo de la prepotencia” del Gobierno central el caso de Cristian Bosco, el surfista cántabro que está ingresado en un hospital de Bali y que necesita ser trasladado a España de forma urgente para ser transplantado de médula ósea. Según ha relatado el presidente cántabro, a petición de la familia, se puso en contacto con los Ministerios de Defensa y Exteriores para solicitar ayuda. María Dolores de Cospedal, que es la que tiene las competencias, tardó “36 horas” en devolverle la llamada y cuando lo hizo afirmó que estudiaría el caso. “Y hasta hoy”, ha lamentado.

No obstante, Revilla, que ha achacado esta situación a la “inquina” del Gobierno central contra su persona y contra un gobierno autonómico de distinto color político, ha anunciado que “no se va a callar” y que está dispuesto “a todo” para “defender lo nuestro”. Por lo pronto, ha apuntado que esta semana las Consejerías de Sanidad y Economía enviarán sendos requerimientos de pago a Moncloa. “En caso de que no lo hagan, buscaremos la manera de enfocar esto jurídicamente”, ha apostillado.

El presidente también ha comparado los incumplimientos del Estado con Cantabria con los beneficios que han recibido otras comunidades en base a la negociación de los presupuestos generales. “Si yo llego a ser diputado en Madrid, hubiera hecho lo mismo, ordeñar la vaca todo lo que pudiera”, ha reconocido Revilla, que ha dado la “enhorabuena” a vascos y canarios, si bien ha precisado que “no es justo y el que tiene que poner orden es el que tiene la pasta”. A este respecto, ha asegurado que ha recibido alguna llamada de algún presidente del Gobierno del PP para transmitirle que está “totalmente de acuerdo” con ese postura y en contra de “este chalaneo”.

Ya en el plano autonómico, el líder del PRC solo ha tenido algunas críticas para la bancada popular por no haber apoyado el pasado lunes una iniciativa parlamentaria para reclamar al Estado las partidas comprometidas y que sí fue avalada por el resto de formaciones. “Hay mucha gente cabreada por la postura del PP”, ha dicho Revilla, convencido de que votantes de la derecha “también dicen que paguen”. En particular, se ha dirigido a la nueva presidenta de los populares, María José Sáenz de Buruaga, que, tal y como ha recordado el jefe del Ejecutivo, aseguró que su partido presentaría una enmienda para reclamar la financiación de Valdecilla, cosa que finalmente no ha sucedido.

“Cantabria avanza”

No obstante, pese al “acoso y derribo” del Gobierno central, Revilla ha asegurado que “Cantabria avanza” y ha considerado que el balance de la coalición PRC-PSOE es “positivo en relación a la herencia recibida”. Así, ha señalado que el anterior Gobierno del PP presidido por Ignacio Diego acabó la legislatura con “11.000 parados más y 14.500 afiliados menos a la Seguridad Social” y “duplicó la deuda sin hacer nada”, dejando una Comunidad “intervenida”.

Frente a ello, Revilla ha destacado que en dos años su Gobierno ha bajado el desempleo en 13.000 personas y ha augurado unas “cifras espectaculares” para final de legislatura.

Una a una ha ido repasando las principales medidas tomadas por las diferentes Consejerías. En materia de industria, Revilla ha reivindicado que, bajo su Gobierno, se ha reabierto empresas como la antigua Greyco y Sniace; se ha mantenido Forjas de Cantabria, y se ha firmado un acuerdo con Sidenor que permite tener un “cierto horizonte de garantía”.

También se ha felicitado de la modificación legislativa de la ley del suelo que permite actividad minera en la comunidad y permitirá el proyecto de la mina de zinc que va a suponer “un antes y un después” para la Comarca del Besaya.

En la misma línea, ha asegurado que “lo del Año Jubilar Lebaniego es impresionante” y como dato, ha sostenido que el concierto inaugural a cargo de Jean Michel Jarre ha supuesto un impacto económico para Cantabria de 11 millones de euros. “Esto ya está rodado”, ha apostillado, al tiempo que ha recordado que los Reyes se han comprometido a visitar Liébana “muy pronto”.

En esta ocasión, el Tren de Altas Prestaciones ha tenido escaso protagonismo. El presidente apenas ha mostrado su deseo de que el ministro de Fomento y exalcalde de Santander, Íñigo de la Serna, “cumpla lo que ha prometido”.

Un Gobierno “sólido” y con “cintura”

Tras repasar las actuaciones por áreas, Revilla ha subrayado en repetidas ocasiones que el Gobierno de coalición es “absolutamente sólido” y con una relación entre los consejeros “muy buena”. En este sentido, ha aseverado que “el pacto funciona” y aunque ha negado de forma tajante “guerras” internas, sí ha reconocido que “cada uno tiene sus competencias y a veces hay discrepancias” a las que ha restado importancia.

Otro “logro” de este Gobierno -ha continuado el presidente- es que “hemos sabido dialogar”. “Tenemos cintura, no somos un Gobierno prepotente”, ha afirmado Revilla, que ha vaticinado que los próximos dos años van a ser “difíciles” porque cada partido buscará prepararse de cara a las próximas elecciones en 2019.

En esta misma línea, ha enfatizado que el bipartito está cumpliendo los compromisos con Ciudadanos “y desde luego lo estamos cumpliendo en un 90% con Podemos, digan lo que digan”. “Si se arrepienten de haberme votado tienen derecho a rectificar, pero yo que firmé ese documento y tengo la conciencia tranquila”, ha dicho Revilla lanzando un órdago a los podemitas, que en varias ocasiones han insinuado una posible moción de censura.

“Cuando paguen, me callo”

Revilla acabó su discurso como empezó, lanzando una “advertencia” al Gobierno de España: “No vamos a consentir ofrendas a Cantabria. No, de ninguna manera. Y desde luego vamos a exigir lo que es nuestro”, insistió el presidente “cargado de razones”. “Lo tienen fácil. En el momento en el que paguen lo que deben, yo me callo e incluso doy las gracias”, concluyó.

Finalmente, el jefe del Ejecutivo enfatizó que Cantabria “avanza” y “va bien”. “A pesar de que el PP está intentando hundir este barco desde el centro de operaciones Moncloa, con el capitán Rajoy y el brigadier Montoro, no lo van a conseguir”.