El Parlamento de Cantabria pospone su intención de acortar los plenos por falta de consenso entre los grupos políticos

La organización de los plenos que se celebran en el Parlamento de Cantabria no sufrirá cambios, al menos en septiembre, cuando se reanude la actividad política. Y es que la falta de consenso entre los grupos ha frenado la propuesta sobre la que llevaban meses trabajando y que consistía en acortar los tiempos de las sesiones, que se celebran los lunes por la mañana y por la tarde (de 10.00 a 14.00 horas y de 16.00 a 20.00 horas generalmente), dividiendo las mismas en función de la naturaleza de sus iniciativas.

De esta forma, la idea era que se celebraran las sesiones de impulso y de control al Gobierno en semanas alternas -en vez de todas las iniciativas el mismo día- y en horario de mañana, los viernes de 9.00 a 14.00 horas. PP y PRC han acusado al PSOE de haberse “descolgado” del acuerdo en el último momento, y han negado que la reforma planteada supusiese una reducción de la labor de control al Ejecutivo autonómico, más bien al revés, ya que han defendido que aunque se celebrara en semanas alternas iba a aumentar, ya que “se incluirían preguntas e interpelaciones” en todas las sesiones.

Así lo han dicho los portavoces de los grupos popular, Íñigo Fernández, y regionalista, Pedro Hernando, en declaraciones a la prensa este martes en la propia Cámara autonómica. Ambos han remarcado que pese a que no es necesaria unanimidad para llevar adelante esta iniciativa -entre ambos grupos suman 23 de los 35 diputados, 15 y 8, respectivamente-, sí han creído oportuno que una norma de esta trascendencia salga adelante por consenso. Y es que se trata de una modificación del reglamento de la Cámara que no se realiza desde 2007.

“Por los motivos que sean, algunos grupos [en alusión al PSOE] se han salido del acuerdo a última hora y de manera sorpresiva. Creo que se pegan un tiro en el pie, pero no se trata de imponer una mecánica de trabajo”, ha dicho Fernández. “Pretendíamos avanzar hacia un Parlamento del siglo XXI, más dinámico y con unos plazos más cercanos”, ha expresado Hernando.

Y es que para ambos, la propuesta que llevaba desde marzo elaborando el grupo de trabajo tras “media docena de reuniones” -y que han desistido de imponerla en la Mesa del Parlamento- suponía una “modernización” del reglamento. “Hemos perdido una gran oportunidad”, ha dicho Hernando.

Por su parte, el secretario general del PSOE y portavoz socialista en la Cámara autonómica, Pablo Zuloaga, ha asegurado en un comunicado que su partido “no va a apoyar ninguna propuesta de ningún grupo parlamentario que pretenda reducir la capacidad de gestión, de acompañamiento, de seguimiento o de impulso del Parlamento de Cantabria al Gobierno de Cantabria”.

“Estamos viendo un Gobierno del Partido Popular en debilidad, en minoría parlamentaria, que precisamente ahora lo que busca es que el Parlamento pierda fuelle”, ha manifestado, al tiempo que ha criticado que no se aprueben otros puntos que incluye la propuesta de reforma anunciada en marzo por la presidenta del Parlamento, en concreto sobre transparencia.

“Seguimos siendo uno de los dos únicos parlamentos en nuestro país que no hace público el patrimonio de sus diputados y diputadas, y esto es algo que no es justo para la ciudadanía de Cantabria”, ha resaltado. “Creo que tienen todo el derecho los ciudadanos y las ciudadanas de Cantabria a saber quiénes les representan y, por eso, seguiremos insistiendo en que el Parlamento de Cantabria tiene que ser transparente”, ha concluido.

Retomar en 2025

Sobre este tema, los portavoces de PP y PRC han señalado que se seguirá abordando en la sucesivas reuniones del grupo de trabajo. Al mismo tiempo, han confiado en poder retomar el asunto de la reorganización de los plenos de cara al primer periodo de sesiones de 2025. Hernando ha dicho que espera que la situación “se pueda reconsiderar”, dejando en el aire la reflexión sobre si “las minorías pueden imponer que no se reforme una norma”. Por su parte, Fernández ha dejado claro que a partir de ahora su grupo político exigirá “otro procedimiento de trabajo” consistente en reflejar por escrito la postura de cada uno, ante la actitud “desleal” que a su juicio ha tenido el PSOE.