Este martes, día 2 de mayo, entra en vigor una resolución de la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha, consensuada con organizaciones agrarias, representantes de las empresas cosechadoras y del sector forestal, que recoge que cuando el Índice de Propagación Potencial (IPP) que se publica diariamente establecido a nivel municipal, se encuentre en niveles de riesgo de propagación muy alto o extremo se suspenderá la quema de rastrojos.
Así, se suspenderán de manera temporal las autorizaciones concedidas para la quema de rastrojos o material vegetal en el medio natural y se prohibirá el uso de maquinaria y equipos cuyo funcionamiento pueda generar deflagración, chispas o descargas eléctricas en los montes y en las áreas rurales situadas en una franja de menos de 400 metros de masa forestal.
La Resolución de la Dirección General de Medio Natural y Biodiversidad responde a las circunstancias anómalas de altas temperaturas y escasas precipitaciones de los últimos meses en Castilla-La Mancha.
En concreto, entre las 15.00 y las 18.00 horas quedará prohibido el uso de cualquier tipo de maquinaria que pueda causar chispas o deflagraciones con el IPP señalando riesgo “muy alto”.
Como excepciones, se podrán realizar trabajos agrícolas, apícolas y forestales con riesgo de IPP muy alto siempre que se cumplan las medidas establecidas y se obtenga la autorización previa solicitud en las diferentes delegaciones provinciales de Desarrollo Sostenible, que se podrá solicitar telemáticamente o presencialmente también en la OCAs, OPAs, y en las ventanillas únicas de la Administración.