Vinos tintos para un verano “al fresco”

Pensamos en verano y ansiamos algo frío: un vino blanco en un cubitera rebosante de hielo o una cerveza en vaso helado. Pero por qué no un tinto ligero, un buen vino con un perfil más fresco, goloso y aromático, propuestas versátiles para acompañar tanto un pisto como una paella.

¿No conoces ninguno? Aquí te dejamos algunos vinos frescos de la región para un verano ‘al fresco’.

Salice de Cuenca:

Un tempranillo con 12 meses en barrica que procede de viñas nuevas a 1.300 metros de altitud en la localidad conquense de huerta del Marquesado y que elabora Bodegas La Posa.

Un tinto de Tierra de Castilla con crianza pero con cierta ligereza, un tempranillo limpio, con matices de regaliz y fruta roja, y un paso agradable en boca.  

Opta de Calzadilla

Un ensamblaje de tempranillo 60%, garnacha 20%, syrah 20%, un vino de pago de esta bodega conquense. Se presenta con aromas a frutas rojas y especias como nuez moscada. Fresco pero untuoso, equilibrado y apropiado para tomarlo con tapas, con ensaladas templadas, huevos, verduras y estofados.

Altolandon by Rosalía

Un 100 % garnacha tinta de cepas centenarias en viñedos de pie franco situados entre el pico de Javalambre y el Cerro Calderón (Cuenca, DO Manchuela) obra de Bodegas Altolandon. La curiosidad es que fermenta en tinajas de terracota durante ocho meses y el ensamblaje nos lleva a una riqueza aromática deliciosa, a rosas, a frutas rojas, al sotobosque de la montaña, e incluso a sus minerales. Mientras que en boca tiene mucho cuerpo sin dejar de ser fresco, además de largo y consistente. 13,5 % Vol. 18 euros.

La Xara de Bodegas Ponce

Bodegas Ponce elabora La Xara, un vino tinto ecológico de Garnacha Tinta acogido a la DO La Manchuela y cuya temperatura de servicio ideal es entre 12 y 14 grados.

Situado en Villanueva de la Jara (Cuenca), los vinos de Juan Antonio Ponce no dejan indiferente. Este tinto procede de cepas de más de 50 años plantadas en suelos arcillo-calcáreo , en bodega la uva fermenta a partir de levaduras autóctonas y pasa por una crianza en foudres durante 10 meses y no se le realiza ningún tipo de filtrado ni clarificado.

Da lugar a un vino lleno de matices con aromas tostados, especiados y frutos negros maduros. En boca presenta cacao, torrefactos y toques minerales.

#Garajewine Brujidera

Un auténtico Vino de Garaje, elaborado a partir de cepas viejas de una variedad autóctona muy singular: la brujidera, que se cultiva sólo en algunas zonas de La Mancha y la Comunidad Valenciana.

Un vino artesano, prueba de la labor de esta bodega que rescata variedades autóctonas en La Mancha toledana, que atrapa la fresca acidez de esta variedad.

Fresco y limpio con aromas a frutas rojas y versátil para acompañar las comidas veraniegas.

A Dos Manos

Un proyecto de la bodega A Pie de Tierra, liderada por dos jóvenes enamorados de la garnacha y de la tierra de Méntrida. El resultado es un vino de pueblo diferente procedente de garnachas de distintas parcelas, trabajadas en ecológico. Maceración de 20 días con un 60% de uva entera. Criado en barricas usadas de roble francés de 225 litros durante 6 meses.

En la botella, fruta roja silvestre, regaliz y lavanda en un trago fresco y largo, muy fino.

... Y por qué no un rosado

Velvet & Stone Bobal Prestige Rosé

Vino rosado de Bobal de la bodega Velvet & Stone, procedente de viñas plantadas 1986, en  Ledaña (Cuenca). El mosto flor se vierte directamente en depósitos de barro con forma de huevo de 1000 litros. Fermenta dentro de ellos con sus propias levaduras, para envejecer con sus lías hasta los seis meses, momento en el que se embotella.

Aromas frutales y boca ágil con volumen gracias al trabajo sobre lías.

Una buena opción para acompañar un arroz, ensaladas, pastas, mariscos y carnes blancas.