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20 años de pasos de gigantes que no admiten retroceso

Miguel Ángel García Bravo, presidente de la Unión Progresista de Estudiantes de Castilla-La Mancha y miembro de la Plataforma por la Educación Pública, ha recordado en la charla “Realidad del colectivo LGTB en la Universidad de Castilla-La Mancha” que el hecho de que los alumnos, docentes y personal administrativo de la Universidad regional se encuentre plenamente integrado en la institución no es un hecho fortuito.

Este logro tiene un trasfondo más importante, que viene, por ejemplo, de la madurez y la formación de las personas que se asume a la hora de entrar en la institución universitaria, no sólo por parte de los docentes, sino también del alumnado que ya entra a la Universidad con unos valores cívicos formados que facilita la integración de todos los colectivos. Si bien hay que tener en cuenta la formación básica en colegios que siguen la doctrina de la Iglesia católica, con más presencia en algunas comunidades autónomas, hoy en día, a diferencia de los últimos años del franquismo, el alumno que no muestra una tolerancia hacia todos sus pares, es quien es finalmente sancionado, no al revés, como sí ocurrió hasta 1978, último año en que la homosexualidad se consideraba ilegal.

Como ya es conocido, asegura Bravo, la universidad es un nicho de integración y autonomía para los alumnos, y ha sido también el origen de un gran número de movimientos reivindicativos de corte social, lo que, unido a la política social desarrollada alrededor de los colectivo LGTB ha potenciado que la integración sea total, siendo la UCLM un ejemplo de esto. Hace diez años, explicaba también, los alumnos sí podían tener problemas, sobre todo aquellos que estudiaban carreras de corte más conservador como Derecho, lo cual se ha ido despejando de a poco.

Además, ha señalado que, si bien, España ha estado a la cola a la hora de aceptar la homosexualidad a niveles legales, los avances que se han producido en comparación con otros países de la Unión Europea como Francia o Italia, donde la homosexualidad se consideró legal con muchos años de ventaja, España se encuentra ahora a la cabeza en términos de integración y normalización social. “Lo que hay que agradecer al colectivo joven, responsable de todos los avances sociales”, ha asegurado García-Bravo. De este modo, afirma también, se debe adoptar un compromiso para seguir luchando por los progresos, porque un paso atrás “sería igual de gigante que los pasos que se han dado en los últimos 20 años, en todos los temas sociales”, finaliza.