La justicia ordena a la Diputación de Toledo a readmitir a 22 trabajadores que fueron despedidos ilegalmente en 2012, y le ordena hacerlo en un plazo máximo de un mes. El Juzgado de lo Social de Toledo condena a la Diputación provincial encabezada por Arturo García-Tizón al pago de los sueldos de este personal así como a su readmisión inmediata.
En total la Diputación ha gastado más de 1'5 millones de euros en este pleito y en lo que tendrá que pagar a los empleados despedidos, a pesar de las varias sentencias judiciales a su favor, procedente de los sueldos que tendría que haber pagado a estos trabajadores que despidió ilegalmente.
El Auto judicial también avisa a la Diputación que tomará medidas en caso de incumplimiento de la sentencia judicial, ya sea en forma de más sanciones a la Diputación como siendo el propio tribunal el que devuelva los puestos de trabajo si la Diputación sigue sin hacerlo, además destacando que debe ser en las mismas condiciones que cuando se produjo el despido ilegal, en verano de 2012.
La justicia ha rechazado las alegaciones hechas por la Diputación que se basaba en que no tenía posibilidad material de readmitir a estos trabajadores porque habían dejado de tener competencias en diversos puntos como en el hospital Nuestra Señora de la Misericordia o la Unidad de Conductas Adictivas, ahora dependientes de la Junta. Para hacerlo señalan que en todo este tiempo la Diputación ha seguido contratando personal en la misma categoría profesional de los despedidos y que tiene otros puestos similares para admitir a los trabajadores. Aún así la Diputación había ofrecido la indemnización por despido improcedente a estas personas, siendo rechazado también por la justicia que condena su readmisión en puesto similar
Este gasto conllevará un ajuste de todo el presupuesto de la Diputación de Toledo ya que es un gasto importante a asumir. Son 32 mensualidades las que tendrá que pagar la Diputación a estos trabajadores cuando la justicia ya había destacado lo improcedente del despido anteriormente.
Los sindicatos han pedido la dimisión de García-Tizón como presidente de la Diputación. Si bien quedan 5 meses de legislatura para el cargo 'popular', los continuos desmanes que ha provocado le han colocado en el disparadero, en un año negro para el presidente de la Diputación que protagonizó la marcha de la corporación local del Partido Popular del Pleno municipal de Toledo para no escuchar a padres de niños con cáncer. “Sus barrabasadas van a costar más de un millón y medio de euros solamente en salarios”, según Comisiones Obreras.
Como balance en este tiempo, García-Tizón deja la fiesta de 100.000 euros que creó como 'Día de la Provincia' y que celebró dos días antes de las elecciones europeas este año, la omisión de datos en su declaración de bienes de la que se desprende que cobra cerca de 10.000 euros mensuales, comprar siete calesas de caballos con el dinero que pidieron que fueran a comedores escolares o proponer trabajos “solo para españoles”, entre otras cosas.