Los “agujeros” que el nuevo Gobierno regional había pronosticado empiezan a aparecer. El primero en la consejería de Educación, según la nueva cabeza de cartera, Reyes Estévez, quien ha informado de la existencia de atrasos en los pagos por 76 millones de euros sólo en su departamento, según informa Europa Press.
Estévez ha señalado que las demoras más importantes se concentran en las áreas del transporte y comedores escolares, en las infraestructuras y conciertos educativos, así como en las universidades de la región. De todos modos, la consejera ha señalado que los atrasos se extienden por todas las áreas de Educación. Desgranando números, Estévez ha señalado que tendrá que usar los 420 millones que se dedican a las acciones de la Consejería para pagar los atrasos y terminar el año en curso. Los más de mil millones restantes en la Consejería se dedicarán a pagar los sueldos de los funcionarios.
Por otro lado, y tras su reunión con el Ministerio de Educación, la cabeza de Educación en Castilla-La Mancha ha señalado que confía en que el Ejecutivo nacional tenga en cuenta las propuestas que le transmitió a Íñigo Méndez de Vigo en relación a la aplicación de la Lomce en la región. En este sentido, Estévez ha asegurado que sus propuestas son una manera de ajustar las necesidades del alumnado de la región a la legislación educativa.
De este modo, la consejera ha querido puntualizar que no se trata de ser un Gobierno “insumiso” a la Lomce planteada por el anterior Ministro de Educación, José Ignacio Wert, sino a una oposición al documento al considerar que creará problemas en la región. A esto precisamente hace referencia el documento de las “siete mayores dificultades” que la Consejería ha detectado en la aplicación de la ley para el próximo curso escolar. Entre ellas, se ha señalado que no se ha podido informar a los padres de los horarios, ni desarrollar los mismos, así como la falta de “sensibilidad” con aquellos alumnos con necesidades educativas especiales.