De los chorizos de Núñez, la carne de Page y la alternativa de izquierdas

Estamos en febrero, a escasos cuatro meses de las autonómicas y municipales. Sin embargo, cuesta adivinar las opciones que los y las castellanomanchegas de izquierdas tendremos sobre la mesa.

La ecuación está resuelta en la derecha: o Partido Popular o Vox. El Partido Popular anda bastante perdido, como viene siendo costumbre. Su candidato, a ratos ejerce de obispo guiando a la gente en el camino de la fe y a ratos pasea por las plazas de los pueblos emocionado por ser nombrado matancero de honor, será que le salen buenos los chorizos. Vox, como hasta ahora mantiene un perfil bajo. No sé si alguien conocerá a su candidato, pero la estrategia de candidato desconocido y cuñadismo rancio en las propuestas les ha funcionado hasta ahora en las citas autonómicas.

En cuanto a propuestas, sencillas. Si hay trasvase, Page no le planta cara a Sánchez y España se rompe. Si no hay trasvase, pues bueno, el egoísmo de Page quiere romper España. Los titulares suelen ser repetitivos: están preocupados por todo, pero para todo tienen soluciones. Lástima que las castellanomanchegas tengamos buena memoria y nos acordemos de cuáles eran las soluciones de Cospedal: recortes en educación,privatizaciones en sanidad… Recortaron tanto que hasta recortaron la mitad del Parlamento regional.

La incógnita está en la izquierda. Page se presenta por el PSOE para revalidar la Presidencia de la Junta. Como orientación de su programa tenemos la gestión de estos últimos cuatro años: enmiendas parciales a los recortes de Cospedal, su gran triunfo: la reducción del Trasvase Tajo-Segura y criticar al Gobierno Central, porque si en algo ha sido constante el Presidente ha sido en distanciarse de la política del Gobierno, especialmente en la conciliación de Cataluña y el resto del Estado.

“¿Va a haber alguna otra opción consistente en la izquierda?”

La pregunta es: ¿va a haber alguna otra opción consistente en la izquierda? Quizás Page no haya realizado una pésima gestión, pero sí una muy mejorable, sobre todo desde el punto de vista de la gente de izquierdas. Sus críticas al Ministerio de Consumo por tratar de seguir los estándares de la OMS y los Objetivos de Desarrollo Sostenible reduciendo el consumo de carne, hacen cuestionarse a cualquiera si entre las prioridades del Presidente de la Junta se encuentra la sostenibilidad o la prevención de enfermedades cardiovasculares.

Las listas de espera en sanidad y la externalización de múltiples servicios como el de ambulancias, las precarias condiciones laborales de los bomberos forestales, la insostenible situación de las limpiadoras o la débil articulación territorial por transporte público son algunas de las cuestiones que quedan siempre en el tintero y que hacen necesaria una opción distinta a la que representa García-Page pero con la fuerza suficiente como para no poner en peligro un gobierno de izquierdas en Castilla-La Mancha.

Parece que esa opción empieza a coger forma, que va a aglutinar a prácticamente todas las organizaciones de izquierdas de la región, salvo al PSOE. Sin embargo, lo más importante no es el quiénes, sino que desde hoy mismo esta alternativa se patee los pueblos de la región con un proyecto solvente para los castellanomanchegos/as, y entonces, sólo entonces, habremos alejado el peligro de que Vox y el Partido Popular reviertan todos los avances conseguidos.

Estamos en febrero, a escasos cuatro meses de las autonómicas y municipales. Sin embargo, cuesta adivinar las opciones que los y las castellanomanchegas de izquierdas tendremos sobre la mesa.

La ecuación está resuelta en la derecha: o Partido Popular o Vox. El Partido Popular anda bastante perdido, como viene siendo costumbre. Su candidato, a ratos ejerce de obispo guiando a la gente en el camino de la fe y a ratos pasea por las plazas de los pueblos emocionado por ser nombrado matancero de honor, será que le salen buenos los chorizos. Vox, como hasta ahora mantiene un perfil bajo. No sé si alguien conocerá a su candidato, pero la estrategia de candidato desconocido y cuñadismo rancio en las propuestas les ha funcionado hasta ahora en las citas autonómicas.