Los familiares de las personas víctimas del franquismo homenajeadas en un monolito instalado en el cementerio de Fuensalida han denunciado la vandalización del monumento dedicado a tres guerrilleros antifranquistas que fueron asesinados en 1947 y han pedido a la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) que interponga denuncia ante la Guardia Civil.
Este monolito, inaugurado hace casi dos años en la localidad toledana, se instaló a la entrada del camposanto en recuerdo de Mariano Álvarez Escobar -fuensalidano-, Tomás López Gutiérrez 'Rubio', de Madrid, y Andrés Iglesias Prieto 'Olivero', de Piornal (Cáceres).
Hace menos de una semana que la Asociación para la Memoria Histórica de Extremadura (ARMHEx) que impulsó en su momento el homenaje había denunciado la actitud del Gobierno municipal del Partido Popular en Fuensalida al trasladar el monolito desde la entrada del camposanto hasta una zona 'escondida', entre restos de obra y fuera de la vista de los usuarios del cementerio. Desde el ayuntamiento no han ofrecido su versión sobre esta decisión tomada por parte del equipo de gobierno del 'popular' José Jaime Alonso.
En su momento, este monolito se había instalado gracias a una subvención de la Secretaría de Estado de Memoria Democrática y en cumplimiento de la propia ley estatal en la materia. La ARMHEx ya explicaba esta misma semana que el traslado hasta la parte final del cementerio se había llevado a cabo sin contar con los familiares ni con la propia asociación y que es “una cierta forma de humillación”.
De hecho, cuando se conoció la intención del gobierno local, María Carmen Alonso -familiar de Mariano Álvarez Escobar, uno de los fusilados- inició una campaña para exigir que no se retirara el monolito. Contó con el apoyo de varias asociaciones memorialistas y llegaron a conseguir más de 27.000 firmas.
Tildaban la decisión del traslado de “revancha” y estudian emprender medidas legales contra el Ayuntamiento de Fuensalida, tal y como indica a este medio el historiador Ángel Olmedo, quien coordinó el proyecto original. “Según la ley de Memoria Democrática puede ser considera una falta grave”, precisa, al tiempo que indica que el alcalde 'popular', José Jaime Alonso, todavía no les ha respondido a las preguntas que le trasladaron por registro el pasado mes de febrero cuando ya advertían de la intención de retirar el memorial que el ayuntamiento nunca llegó a confirmar.
Ahora, unas rayas negras de pintura tapan los nombres de las víctimas un día antes de que se celebre un acto cívico coincidiendo con los dos años de instalación del monolito. Ese acto está previsto para este lunes 12 de agosto en el cementerio. Está organizado por familiares de los guerrilleros y la propia ARMHEx y cuenta con el apoyo de la Asociación por la Memoria Militar Democrática (AMMD), la Asociación Manuel Azaña, la Asociación de Familiares de Ejecutados en el Cementerio de Ocaña (AFECO), PSOE e IU de Fuensalida.
Aunque exponen que no tienen obligación de hacerlo, ya que no es una concentración ni una manifestación, el acto ha sido comunicado tanto a la Subdelegación del Gobierno en Toledo como al propio Ayuntamiento. “No podemos dejar que vuelvan al olvido los que lucharon por la libertad”. Ahora se verá empañado por el acto vandálico.