Un mamífero depredador, Prodissopsalis jimenezi, que habitó en el Eoceno en la cuenca del Duero, hace 40 millones de años, ha sido descrito por paleontólogos del Museo Nacional de Ciencias Naturales del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y de la Universidad Nacional a Distancia (UNED).
La nueva especie de mamífero, del tamaño del chacal y cuyo nombre está dedicado al profesor de la Universidad de Salamanca, Emiliano Jiménez, constituye el primer mamífero depredador del Eoceno medio descrito en la Cuenca del Duero, según publica la revista científica The Anatomical Record.
Los investigadores han indicado que el carnívoro desarrolló una dentición más cortante que la de sus antepasados de forma excepcionalmente rápida a partir del fósil hallado en el yacimiento soriano de La Solana (cerca de la localidad de Mazaterón).
Este nuevo mamífero pertenece al orden Hyaenodonta, uno de los grupos que ocuparon el papel de depredadores en la Península Ibérica tras la desaparición de los dinosaurios y antes de la diversificación de los verdaderos carnívoros (orden Carnivora).
El nombre elegido para la nueva especie rinde homenaje al profesor de la USAL recientemente fallecido y pionero en el estudio del Eoceno de la Cuenca del Duero, que dirigió las excavaciones en Mazaterón a finales de la década de 1980 y principios de la de 1990.
El científico titular del MNCN en el departamento de Paleobiología y primer firmante del trabajo, Manuel Salesa, ha explicado que durante el Eoceno medio, hace unos 40 millones de años, la zona noroeste de la Península Ibérica quedó geográficamente aislada tanto del resto de zonas peninsulares como de Europa, actuando como refugio para la fauna de vertebrados y dando lugar a nuevas especies exclusivas de esa zona.
“La cuenca del Duero ha proporcionado información abundante sobre la fauna que habitó España durante el Eoceno pero, aunque existen algunos trabajos publicados sobre reptiles y mamíferos herbívoros, hasta el momento no existía información relevante sobre la presencia de mamíferos depredadores”, ha señalado.
Además, precisa que el estudio se ha centrado en un fósil excepcional, una mandíbula correspondiente a un individuo juvenil que posee parte de la dentición de leche junto a algunas piezas definitivas, lo que nos ha permitido inferir el patrón de erupción dental de estos primitivos depredadores.
Para el estudio de esta mandíbula, se ha realizado una Tomografía Axial Computarizada (TAC) del fósil en el laboratorio de técnicas no destructivas del MNCN, lo que ha permitido conocer la morfología de las piezas dentales que aún no habían hecho erupción.
La investigadora del MNCN Gema Siliceo ha indicado que trabajaron sobre los archivos digitales para crear modelos virtuales de los dientes sin dañar el fósil, lo que permite describir y comparar su morfología con la de especies cercanas.
La comparación realizada muestra como Prodissopsalis jimenezi había desarrollado una dentición más cortante que la de sus antepasados del Eoceno inferior, con crestas largas y afiladas en los molares inferiores, y una reducción de la parte trituradora. “Esto es sorprendente porque apunta a una rápida evolución en comparación con otras especies cercanas en el tiempo”, continúa la investigadora.
Finalmente, el profesor titular de la UNED Francisco Ortega ha subrayado que estos resultados ratifican el carácter “excepcional” de las faunas del Eoceno de la cuenca del Duero“ y aumenta el interés del equipo por seguir estudiando estos yacimientos.
Ortega, que participó en las excavaciones en Mazaterón junto a Emiliano Jiménez y que continúa ligado al estudio de la colección de vertebrados fósiles del Eoceno (hace entre 56 y 34 millones de años) de la cuenca del Duero depositada en la USAL, concluye que “este trabajo, realizado en colaboración con nuestros colegas del MNCN, abre sin duda una nueva etapa en el estudio de la fauna de mamíferos depredadores de esta cuenca, que estamos seguros, seguirá dando resultados muy interesantes”.