La portada de mañana
Acceder
Peinado multiplica los frentes del ‘caso Begoña’ sin lograr avances significativos
El miedo “sobrenatural” a que el cáncer vuelva: “Sientes que no consigues atraparlo”
OPINIÓN | 'En el límite', por Antón Losada

Ada Colau visitará a los refugiados sobre el terreno para preparar la acogida en Barcelona

La alcaldesa Ada Colau ha anunciado este jueves nuevas medidas para dar forma al proyecto de hacer de Barcelona una ciudad-refugio. En primer lugar, ha nombrado a un responsable de coordinar todas las políticas del Ayuntamiento en la materia de forma transversal. Ignasi Calbo, hasta ahora en l'Agència Catalana de Cooperació, ocupará esta función. La alcaldesa considera que esta debe ser una “política de ciudad”, y por ello se ha reunido para hablar con todos los grupos del pleno municipal y en la próxima sesión del plenario aprobarán una moción consensuada para declarar Barcelona una ciudad-refugio.

Colau ha anunciado que entre las medidas se está preparando una visita sobre el terreno, “tanto en las zonas de tránsito como en países que estén afrontando ya la acogida, como Alemania, y poder avanzar así todo lo que esté en nuestras manos para que la ciudad esté lo mejor preparada posible”, ha dicho. “No es por capricho ni para ir de viaje, la situación es grave, de vulneración de derechos humanos, y se está agravando, también por las cuestiones climáticas, porque el centro de Europa empezará a hacer mucho frío, y haremos todo lo que esté en nuestras manos”, ha añadido.

“Los estados deciden sobre las políticas de asilo pero las ciudades son los lugares finales de acogida”, ha apuntado la alcaldesa, que ha lamentado que “no se esté contando con las ciudades” para planificar estas políticas. Por ello, ha asegurado que el proyecto de la ciudad-refugio tiene entre sus objetivos, por un lado, “impulsar y articular una política que debe ir mucho más allá del ayuntamiento” y, por otro, “hacer incidencia en el ámbito internacional y especialmente el estatal”.

Acogida profesional

A pesar del éxito de respuesta al buzón abierto por el consistorio para que los ciudadanos se ofrecieran a acoger refugiados, Colau ha apuntado que no está previsto inicialmente que haya alojamiento en casas familiares. “Esta no será la primera forma de acogida, porque no está especialmente recomendada por los profesionales que dominan la materia”, ha apuntado la alcaldesa, que ha agradecido el apoyo. Ha agradecido especialmente los ofrecimientos de pisos vacíos, ya que a diferencia de los pisos habitados, se pueden incorporar a la bolsa de viviendas de emergencia social para dar respuesta a esta situación.

La alcaldesa ha remarcado la importancia del apoyo ciudadano especialmente en una segunda fase en la que se pueda pasar “de la acogida a la incorporación”. “Queremos que Barcelona sea una ciudad de derechos, donde las personas que vengan puedan incorporarse como un vecino más”, y ahí, ha dicho, será crucial el apoyo ofrecido por personas que se han mostrado dispuestas a introducir la ciudad a los recién llegados, o familias mixtas árabe-catalanas que quieren colaborar con la acogida.

Finalmente, el consistorio también ha destacado la importancia de apoyar a las entidades humanitarias que ya trabajan sobre el terreno, por lo que plantea destinar una parte importante de la partida que destinarán a acogida. De entrada, se ha incrementado en 100.000 euros la partida destinada al Servei d'Atenció a Immigrants, Emigrants y Refugiats (SAIER), que ya tiene más de un millar de solicitudes de asilo este año a la espera de respuesta del Estado. En la ampliación del presupuesto planteada ayer, Colau propondrá al pleno de la ciudad dedicar 10 millones de euros del superávit de la ciudad a las políticas de asilo.