La comparecencia del presidente de la Generalitat, Artur Mas, en la comisión de investigación el Fraude y la Evasión Fiscales y las Prácticas de Corrupción Política ha creado una enorme expectación. No solo por lo que pueda decir Mas sobre los asuntos de corrupción que afectan a CiU vinculados a las denuncias de enriquecimiento del expresidente Jordi Pujol y su familia, sino también por cuales serán las consecuencias de sus palabras para el estado de las relaciones entre esta coalición y ERC , el partido que le da apoyo parlamentario.
Mas, primer presidente de la historia de la Generalitat que desfilará ante una comisión de estas características, comparece después de que ERC se negara en cuatro ocasiones a que se le convocase. ERC se oponía a su comparecencia argumentado que el presidente de la Generalitat tenía que hacerlo en la Comisión de Asuntos Institucionales a petición propia, pero no tomó ninguna iniciativa para hacerlo. Este hecho, sumado a nuevas informaciones según las cuales el exsecretario general de CDC, Oriol Pujol, habría pedido dinero para facilitar entrevistas con Artur Mas, empujó al partido de Oriol Junqueras a pedirle, por fin, que dé explicaciones ante la comisión Pujol.
Para dar más relieve a la sesión, algunos partidos contemplan la posibilidad de cambiar hoy sus portavoces en la comisión y dejar paso a sus líderes parlamentarios. Es el caso de Iniciativa o Ciutadans, que al parecer estarán representadas en la comisión este lunes por Joan Herrera y Albert Rivera, respectivamente. Por parte de ERC, será Oriol Amorós el el encargado de interrogar al presidente. No parece que el presidente de ERC, Oriol Junqueras, le vaya a sustituir.
Se prevé una sesión larga e intensa, de la que se podrá deducir el rumbo que tomen las relaciones entre CiU y ERC en los próximos días. CiU encajó muy mal que el partido de Junqueras facilitara la comparecencia de Mas. El propio portavoz del Govern, Francesc Homs, llegó a decir que esta decisión ponía en peligro la convocatoria adelantada de las elecciones al Parlamento, el próximo 27 de septiembre.
Según han explicado a Efe fuentes parlamentarias, el formato de la comparecencia de Mas ha sido acordado entre la Generalitat y la presidencia de la comisión de investigación del caso Pujol, que recae en David Fernández, de la CUP, ya que el reglamento del Parlament regula las comparecencias del presidente y de los miembros del Gobierno de la Generalitat en las comisiones normales, pero no en las de investigación.
De acuerdo con el formato acordado, según las mismas fuentes, Mas hará una intervención inicial de aproximadamente treinta minutos. Posteriormente los grupos parlamentarios, de mayor a menor y cerrando CiU, formularán sus preguntas, a las que el presidente catalán responderá grupo a grupo de forma individual. Después, se abrirá un segundo turno para que los grupos puedan hacer nuevas preguntas aunque, en esta ocasión, Mas responderá de forma conjunta a todos los partidos.