La Generalitat ha anunciado a los farmacéuticos una vez más que se retrasa el pago de los medicamentos dispensados y que el Servei Català de la Salut, el proveedor, no dispone de más dinero para pagar medicamentos hasta que llegue desde el Ministerio de Hacienda una aportación extraordinaria.
Cuando una persona compra un medicamento en una farmacia, el farmacéutico paga parte de la factura y después la administración, a través del CatSalut, le paga lo correspondiente en función de los medicamentos dispensados. El último retraso en el pago era ya de tres meses desde la fecha de factura de la venta del medicamento; ahora el nuevo retraso significará que cobrarán a cuatro meses desde la factura. Según explica el Col·legi Oficial de Farmacèutics de Barcelona (COFB) en una nota de prensa, si no cobran ninguna factura el próximo 5 de noviembre, fecha en la que estava previsto el cobro, la deuda de la Generalitat con los farmacéuticos superará los 330 millones de euros, que es la suma de la deuda acumulada en los meses de julio, agosto y septiembre, de 121,5, 100 y 112,5 millones de euros, respectivamente.
El sector farmacéutico, que hace cuatro años que sufre retrasos en el pago de las facturas, denuncia “insensibilidad y falta de previsión” por parte de la administración. El anuncio de la Generalitat de este nuevo retraso supone, además, una situación peor que la del año anterior en cuanto a estabilidad en los pagos y por tanto, se encuentra “lejos de mejorar con la anunciada salida de la crisis”. Jordi Casas, vicetesorero del COFB, muestra incomprensión ante el nuevo anuncio de la administración y lamenta que empiece a ser “tristemente habitual” el retraso del pago de los medicamentos. Casas explica a Catalunya Plural que la pregunta no es qué piensa hacer el sector farmacéutico para denunciar la situación sino que piensa hacer la administración para pagarles. “No queremos que una situación de irresponsabilidad política, como es no hacerse cargo de la medicación de la población, repercuta en los ciudadanos”, asegura.
Por su parte, fuentes del Departament d'Economia atribuyen la demora al déficit no financiado de 2014, que “es una cantidad aceptada por el Ministerio de Hacienda y no calendarizada”. Según explican a este medio esta cantidad debería financiarla el Ministerio a través del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) al que está adherido Catalunya y que consistiría, según fuentes del departamento, en una cantidad acordada de 2.300 millones de euros.
La solución que apuntan desde el Govern llegaría con la habilitación de un FLA extraordinario para poder hacer frente a la deuda, un fondo que está pendiente de aprobación por parte de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos, que según ha explicado Jordi Casas se habría reunido este jueves pero no habría aprobado el fondo extraordinario.
Ante esta situación, los farmacéuticos denuncian la falta de responsabilidad y compromiso de las administraciones para garantizar el pago de los medicamentos y reclaman que se planifique adecuadamente con la elaboración de presupuestos realistas. “A principios de 2015 ya dijimos que la partida para Medicación estaba infradotada”, recuerda Casas.
Por otra parte, Antonio Torres, presidente de la Federació d'Associacions de Farmàcies de Catalunya, remarca en la nota de prensa que “el medicamento no es un bien de consumo, tiene un valor esencial para la salud de la población y corresponde exclusivamente a la Administración su financiación”.
En el último año el volumen de facturas de medicamentos dispensados y sin pagar ha fluctuado hasta tres veces: en septiembre de 2014 pasó de 1 a 2 meses acumulados; en febrero pasó de 2 a 3 y el mes de abril vuelve a ser de dos meses después de la llegada de un FLA extraordinario.