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El Govern y los 'comuns' alcanzan un preacuerdo para subir el IRPF a partir de los 90.000 euros

Las conversaciones entre Catalunya en Comú y el departamento de Economía que dirige el vicepresident Pere Aragonès sobre los próximos presupuestos catalanes avanzan. Según ha adelantado este lunes la líder de los 'comuns' Jéssica Albiach y ha confirmado el Govern, ambas partes han alcanzado un preacuerdo sobre fiscalidad que consistiría en introducir un nuevo tramo autonómico del IRPF a partir de los 90.000 euros anuales, que se gravaría al 23%, a la vez que se subiría el tramo por encima de los 120.000 euros hasta el 25%, un punto y medio más que el actual.

Esas cifras concretas han sido desveladas por Albiach en una entrevista en RAC-1, aunque los 'comuns' han negado dar más detalles sobre el estado de las negociaciones. Fuentes de la Vicepresidencia sí han confirmado que, aunque aún no se han acabado de cerrar todos los detalles, la Generalitat sí está dispuesta a comprometerse a aumentar el IRPF en los tramos más altos. Con la misma reforma fiscal el equipo de Aragonès quiere introducir una rebaja de los tipos a las rentas más bajas, una medida que hace tiempo se persigue desde el Govern.

El preacuerdo sobre la reforma fiscal incluye también cambios en el impuesto de sucesiones, otro de los caballos de batalla de los 'comuns'. Según explican fuentes conocedoras de la negociación, el Govern habría accedido a eliminar algunas de las bonificaciones que se realizan actualmente y ahora las conversaciones se encaminan también hacia un aumento de tipos. Aragonès ya propuso en el ejercicio pasado una reforma del impuesto de sucesiones que el departamento calculaba en un aumento de la recaudación anual de 80 millones.

Desde la Vicepresidencia resaltan que el plan fiscal en el que trabajan va en la línea de la propuesta de resolución aprobada en el Parlament con 88 votos a favor, con la que sumaron al PSC, 'comuns' y los dos partidos del Govern. En aquel texto apostaban por “impulsar una reforma fiscal progresiva que modifique la fiscalidad en los impuestos sobre la renta y de sucesiones y poner en marcha la fiscalidad verde para luchar contra el cambio climático”. El aumento que plantean en IRPF, resaltan en el Govern, afecta al 2% de la población que más gana. Además indican que aspiran a tener una fiscalidad medioambiental “en la línea de lo que plantean organismos internacionales” como la Unión Europea, la OCDE y la Agenda 2030.

Ambas partes han calificado el entendimiento en la cuestión fiscal de “preacuerdo”. Con todo, la negociación global para que los 'comuns' acepten aprobar los presupuestos aún está lejos de cerrarse. Los de Albiach avisan que, más allá de la cuestión sobre los impuestos, el Govern debe presentarles medidas concretas para revertir los recortes si quieren su voto positivo para las cuentas.

Las conversaciones para sacar adelante los presupuestos se han sucedido con discreción desde las últimas elecciones generales, cuando la vicepresidencia y la formación de izquierdas retomaron la negociación. Para el vicepresident Pere Aragonès y el conjunto de ERC, tener unos presupuestos en 2020 es una prioridad absoluta, después de dos años con las cuentas prorrogadas. Tanto que Aragonès ya ha avisado que sin nuevas cuentas, en su opinión no deberían descartarse las elecciones.

Los 'comuns', por su parte, aspiran a una triple carambola, ya que colaborando con ERC en las cuentas de la Generalitat podrían facilitar a Ada Colau conseguir apoyos para los presupuestos del ayuntamiento de Barcelona y, a la vez, atraer a los republicanos hacia una postura de entendimientos con el PSOE que facilite la investidura de Pedro Sánchez.