El presidente del PP y President de la Generalitat, Alberto Fabra, ya ha visto pelar las barbas del vecino. Pese a que su “olfato” le decía que el PP iba a afianzarse en la Generalitat, las urnas -la única encuesta válida según todos los políticos- han confirmado la tendencia de las encuestas que se han publicado en los últimos meses. Y esto preocupa a Fabra.
El mismo presidente 'popular' lo reconocia este lunes tras salir de la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP en Madrid para valorar los resultados de las elecciones europeas, y a preguntas de los periodistas respondía un tajante “claro que estoy preocupado”. Pero la lectura que hace el President de la Generalitat no es tanto de cambio de políticas, sino de hacer entender el por qué se aplican.
Pese a una primera valoración en la misma noche electoral autocomplaciente por haber sido todavía la fuerza más votada pese a su descalabro, la reflexión ha llegado para recapacitar seriamente sobre lo ocurrido con su electorado.
El mensaje que quiere lanzar Fabra es que hay que “seguir trabajando para que los ciudadanos vean que ese esfuerzo compartido que hemos realizado estos últimos años ha valido la pena”, es decir, el problema es que hay que hacer más pedagogía, no un giro en la forma de gobernar, según su análisis.
Pero tampoco rechaza Fabra hacer bandera de la victoria pírrica especialmente contra un contrincante, el partido socialista, que ha reaccionado inmediatamente con un cambio en la dirección a nivel estatal. Además el President se compara con otros gobiernos europeos, afirmando que el de España “es de los pocos gobiernos que ha mantenido los votos suficientes para poder ganar las elecciones, cosa que no ha pasado en Francia o en Grecia, Italia o Reino Unido”.
Ahora a Fabra ya le queda menos de un año para dedicarse a recuperar electorado, especialmente encomendándose a que la recuperación económica que pregona el PP beneficie algun dia al ciudadano, especialmente en forma de creación de puestos de trabajo, porque la Comunitat Valenciana se encuentra actualmente en mínimos históricos.
No obstante Alberto Fabra todavía necesita el espaldarazo definitivo de su propio partido para ser candidato, puesto que todavía no ha sido confirmado. Para ello puede que al menos estas elecciones le sirvan para quitarse una piedra del zapato, Alfonso Rus, quien advertía que estos comicios servirían como piedra de toque para el liderazgo de Fabra, y finalmente quien ha visto cuestionado su liderazgo ha sido Rus en Xàtiva donde no ha llegado ni a la media de votos del PP autonómico ni del PP estatal.
El PP ha perdido medio millón de votos, y tendrá que remar mucho durante el año que queda hasta las autonómicas, porque aunque el PSPV se descalabre a la par con ellos, todo apunta a que el vuelco hacia la izquierda del electorado pondrá fin a un ciclo de 20 años del gobireno del PP.