Chirbes y Hitchcock en la Valencia más negra
Valencia se tiñe de negro. La celebración del festival 'Valencia negra' desde este viernes al próximo 15 de mayo ha conquistado hasta veinte escenarios de la ciudad. Las Naves, el FNAC, el Café Rialto o la Sala Russafa serán varios de los lugares donde las historias plagadas de crímenes, tramas sórdidas y el misterio se entrecruzarán para despertar la intriga más profunda del espectador. Relatos de ficción que se asemejan demasiado a la realidad acontecida en los tiempos de la fiesta del ladrillo.
La Sala Russafa acogerá otro homenaje a un maestro recientemente desaparecido. Los periodistas Mikel Labastida y Xavier Aliaga destriparán este viernes la obra y el legado del escritor Rafael Chirbes, considerado como uno de los mayores cronistas de esos tiempos donde los sobornos y los maletines se consideraban como algo normal. Aunque varios críticos siempre le han querido quitar esta etiqueta y calificarlo como el escritor de las “crisis humanas”. El acto concluirá con la entrega a título póstumo al novelista de Tavernes de Valldigna del Premio Francisco González Ledesma. Se trata de un galardón creado por Valencia Negra para reconocer la trayectoria de destacados escritores.
Antes del particular tributo que quiere rendir el festival al escritor valenciano, el teatro acogerá un encuentro con el escritor Antonio Manzini. Su misión será dar las claves del personaje estrella de sus libros Rocco Schiavone, un policía que se ha criado en un barrio popular de Roma, donde ha aprendido las reglas de la calle.
Chirbes, sin embargo, no será la única estrella del festival. La Sala Russafa ofrecerá una función de clásico género negro como es 'La Soga'. Una obra que Alfred Hitchcock llevó a la gran pantalla con James Stewart de actor protagonista. La representación, que se podrá disfrutar entre los períodos del 6 al 8 y del 13 al 15 de mayo, está adaptada por Iria Márquez.
La función recrea una morbosa cena alrededor de un arcón que esconde un cadáver. El encuentro, aparentemente inocente, se convierte sin saberlo en una reunión donde se juntan los familiares y amigos del asesinado y los propios verdugos. La obra, que nació de la mano de Patrick Hamilton, fue popularizada por Hitchcock.
Dario Torrent, Jaime Vicedo, Vicent Pastor, Raquel Ortells, Rosa López y Juan Carlos Garés son los encargados de dar vida a un montaje más bien sobrio. Ambientado en 1950, y con juegos de sombras para dar más emoción e intensidad a este thriller que reflexiona sobre la superioridad moral de unas personas y sobre la impunidad de los crímenes.
