La Comisión de Patrimonio ha dado luz verde al proyecto de restauración del Pont Vell del s.XVI, una actuación que está a la espera del visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHX) y que cuenta con un presupuesto de 720.000 euros. El regidor coordinador del área de Territorio, Joan Sanchis, explicaba que “como que falta el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para poder iniciar la licitación de la obra calculamos que la obra pueda empezar a partir de la segunda mitad de 2021”. Hay que recordar que ya ha finalizado la ejecución de la primera fase de restauración del Pont Viejo, que ha permitido recuperar la imagen que tenía el puente a principios del SXX.
Durante las obras se sacó a la luz el antiguo muro de embarque, un arco y una vuelta. Así mismo se han restaurando los muros de contención y se han construido unas escalas y rampas al lecho del río Clariano. Hay que recordar que después de esta primera fase el proyecto de restauración contemplaba otros tres, pero “después de la DANA se decidió unificarlas en un único proyecto integral para acelerar su restauración ante los informes que alertaban del deterioro de la estructura del Pont”, manifestaba.
El proyecto de restauración, que ha sido redactado por la Universitat Politècnica de València en concreto por el Instituto de Restauración del Patrimonio (IRP) y del Grupo de Investigación sobre paisaje y arquitectura rural (PAISAR), tendrá en cuenta los posibles restos que se puedan encontrar una vez se inician las obras según se acordó a la Comisión de Patrimonio. El proyecto ha sido preparado con un escáner 3D, el que ha permitido comprobar las deformaciones que ha sufrido el Pont Viejo con el paso del tiempo.
El estudio refleja una serie de daños en el puente, consecuencia de las riadas, el uso y los efectos de adecuación de las antiguas fábricas. El informe también evidencia daños en los arcos donde se han detectado desajustes en los sillares, reparaciones con materiales inadecuados, fragmentación y pérdida de elementos y colonización vegetal. Estos daños propiciaron el cierre al tráfico rueda del Pont Viejo para prevenir una agravación de su estado.
La actuación, reclamada por la ciudadanía al proceso Ontinyent Participa y que forma parte del programa Riu Viu del Gobierno de Ontinyent, persigue conservar un elemento clave de nuestro Patrimonio, a la vez que potenciarlo como elemento de atracción turística y promoción de la ciudad.