El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha reconocido que la situación en Catalunya tuvo un “impacto moderado” en la fuga de depósitos y dinero en cuentas que se “frenó y revirtió” con el cambio de sede social.
CaixaBank ha celebrado su primer consejo de administración en València tras el cambio de sede social tras el referéndum del 1 de octubre y la posterior tensión política en Catalunya. Gortázar ha afirmado que “si el cambio (de sede a Valencia) hubiera sido temporal lo hubiéramos dicho”, aunque tampoco ha querido pronunciar la palabra “definitivo”, a preguntas de la prensa.
“Hemos trasladado la sede a la Comunitat Valenciana porque confiamos en su estabilidad. Es un voto de confianza con este territorio. Tenemos más de un millón de clientes y 2.000 trabajadores”, ha argumentado.
“El cambio de sede social fue una razón técnica, para proteger los intereses de nuestros clientes. Queríamos seguir bajo el paraguas de la Unión Europea”, ha explicado. El cambio de sede no pasó por la Junta General por el cambio legislativo que facilitó ese cambio. “El consejo lo votó por unanimidad”, ha puntualizado.
A partir de ahora el consejo de administración se reunirá de manera ordinaria en València y realizará sus juntas generales de accionistas en la capital valenciana, ha confirmado el consejero delegado de CaixaBank.
Impacto económico de la tensión en Catalunya
Respecto al impacto que puede tener la tensión en Catalunya en la economía española, Gortázar ha explicado que “si la situación actual no se prolonga se podrá corregir el impacto”. De momento, ha asegurado, “preveo un crecimiento superior al 3 %”. El consejero delegado de CaixaBank no ha querido opinar sobre la revelación de la Ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, sobre que en un día se fugaron 4.000 millones de euros.
“Hay clientes que se han preocupado por tener cuentas de CaixaBank fuera de Catalunya”, ha confirmado, al tiempo que ha puntualizado: “No hay ninguna necesidad para hacerlo”. “El dinero está seguro esté dentro o fuera de Catalunya”, ha sentenciado. “Tengo todo mi patrimonio en mi cuenta de la oficina de Diagonal. No hay peligro pero se pondrán todas las facilidades a quien quiera cambiar su cuenta a otras comunidades”, ha dicho.
Sobre la campaña montada por las entidades soberanistas para que se retire dinero de CaixaBank y las otras entidades catalanas que han salido de Catalunya, Gortázar ha manifestado que estas actuaciones “no facilitan la convivencia”. En los nueve primeros meses del año, CaixaBank ha crecido un 18,5 % en activo líquidos y un 54 % en beneficios hasta los 1.448 millones.