La Fiscalía del Tribunal de Cuentas le ha dado un rapapolvo a la Diputación de Alicante, gobernada por el Partido Popular y Ciudadanos, a cuenta de la contabilidad opaca del grupo popular que ha denunciado Compromís. La letrada de la institución provincial interpuso un recurso de reposición contra el auto de la sección de enjuiciamiento del Tribunal de Cuentas que que admite la denuncia del portavoz de Compromís en la Diputación, Gerard Fullana, al considerar que los hechos “no presentan indicios de responsabilidad contable”. El Ministerio Público, por el contrario, ha avalado que el descontrol en las cuentas del grupo popular, que transfirió fondos al partido por más de 446.000 euros, supone un posible perjuicio causado al erario público.
El portavoz de Compromís en la Diputación de Alicante, Gerard Fullana, considera que la inadmisión del recurso es una “jarra de agua fría” para el presidente de la institución provincial, Carlos Mazón. “Es un paso más en nuestra lucha por una gestión transparente del dinero público y un jarro de agua fría para el presidente de la Diputación de Alicante, quien intenta de todas las posibles maneras no devolver los 446.000 euros sin fiscalizar que fueron ingresados en la cuenta del partido desde la institución”, ha afirmado.
El próximo paso del Tribunal de Cuentas consiste en proponer el nombramiento de un delegado instructor. “A tenor de lo visto, el Tribunal no tiene ninguna noticia de en qué se ha gastado el PP su subvención pública y si lo ha hecho de acuerdo a la normativa de la Diputación que sí exige que se aplique a toda asociación y partido que recibe dinero público”, ha insistido Fullana.
“Es la segunda vez”, ha declarado Fullana, “que el Tribunal de Cuentas le archiva al señor Mazón su voluntad de echar tierra encima de ese medio millón de euros que el PP se ha ingresado desde la Diputación sin acreditar absolutamente nada. Lo que le pedimos al presidente de la Diputación y del PP de la provincia de Alicante es que rinda cuentas ante la Diputación y la justicia, que entregue los justificantes de gasto o, si no, que devuelva el dinero de forma inmediata”.
Compromís considera “grave” que Mazón vuelva a “anteponer los intereses del partido por encima de los de la sociedad” como ya hizo al intentar evitar pagar el “pufo dejado en IFA” cuando organizó una cena de militantes y que le acabó reclamando la Agencia Antifraude.
“Los intentos del PP de no someterse al ejercicio de acreditación de gasto al que sí sometió la Intervención a toda la oposición han derivado además en un contrato a dedo a una empresa auditora para que revise las cuentas del PP, una contabilidad a la que nadie más tiene acceso en la institución”, remarca Fullana. Compromís considera que es un “movimiento desvergonzado y esperpéntico” que ofrece aún más dudas sobre el gasto del dinero y que supone un gasto público de más de 14.000 euros “para maquillar las acciones del PP”.