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Ximo Puig respalda el decreto de plurilingüismo: “Esta es una política de gobierno”

“Esta es una política de gobierno”. Para que nadie se lleve a engaño, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha dado así este lunes un espaldarazo rotundo al proyecto de decreto de plurilingüismo que la semana pasada anunció el conseller de Educación y Cultura, Vicent Marzà. Un decreto que modifica el sistema imperante en la enseñanza en valenciano para implantar seis niveles a los que podrán adherirse los centros educativos cuya garantía de conocimiento del valenciano, el castellano y el inglés, como lengua extranjera, será progresivo y producirá certificaciones oficiales de dominio de idiomas.

“Es un decreto fundamental que entre todos hemos de hacer nuestro”, ha añadido Puig, tras elogiar la diversidad lingüística como un valor europeo. El presidente ha intervenido en la celebración del Día Europeo de las Lenguas junto a Marzá, que ha asegurado que el decreto “va a la raíz”, ya que busca garantizar que, en efecto, los estudiantes dominen las tres lenguas al acabar sus estudios. El titular de Educación ha indicado que este curso se suman 40 profesores nuevos a las escuelas oficiales de idiomas, que además incorporan a su docencia cuatro nuevas lenguas: el japonés, el neerlandés, el rumano y el euskera. Marzá se ha referido a la volunatd de “concordia” que preside su política.

Las palabras de Puig y de Marzà se han producido en el acto de instalación del denominado “arbre de les llengües” en los jardines de la sede de la conselleria, dentro de los actos del día Europeo de las Lenguas que también han reunido a cientos de escolares convocados por actuaciones musicales y actividades lúdicas.

El “arbre de les llengües”, una escultura realizada a partir de mástiles de farolas retiradas por el Ayuntamiento de Valencia y de pequeñas piezas que representan a los idiomas del mundo, representa, según el director general de política Lingüística, Ruben Trenzano, “lo contrario de la torre de Babel”. Una idea sobre la que ha insistido Marzà al asegurar que “la diversidad lingüística aporta más riqueza al mundo”