El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado este lunes que el cobro de intereses por el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) a la Generalitat es “un nuevo impuesto” que se pone a los valencianos por un gobierno que está en funciones.
Puig ha criticado que se cobren los intereses del fondo porque es “un doble castigo” para la Comunitat, tanto por la falta de un nuevo modelo de financiación como por la deuda histórica, que en los últimos diez años asciende a 16.000 millones de euros. A su juicio, es “profundamente injusto y lamentable” que se cobren esos intereses y se hará todo lo posible “para que no sea así”.
“Es una mala broma que este gobierno, que están en funciones, nos ponga ahora un nuevo impuesto a los valencianos, y eso no es tolerable”, ha manifestado al ser preguntado por esta cuestión antes de un almuerzo con la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE).
Puig ha asegurado que el gobierno en funciones tendría que ser “al menos al final de su mandato” ecuánime y justo con los valencianos.