La plaza del Ayuntamiento de València quedará liberada de tráfico los días 25 de diciembre y 1 de enero en previsión de la multitudinaria asistencia a las atracciones instaladas en el centro de la misma, en concreto, la pista de hielo y el tiovivo instalado por la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico.
Además, el 31 de diciembre, pese ser el último domingo del mes, el cierre de la plaza al tráfico podría retrasarse a la tarde para facilitar la asistencia de ciudadanos al núcleo comercial de la ciudad.
Por la noche, está prevista una gran fiesta de Nochevieja con música y castillos que dará comienzo a las 22.45 horas, y se prevé que se prolongue hasta las 01.45 horas, es decir, alrededor de tres horas de duración.
Campanar ya es zona 30
Por otra parte, la Concejalía de Movilidad Sostenible, ha ejecutado una actuación integral de mejora de la movilidad y de la seguridad vial y de pacificación del tráfico en el barrio de Campanar.
Desde Movilidad han asegurado que esta intervención surge de las conversaciones mantenidas con representantes de la asociación de vecinos y vecinas de Campanar, que históricamente han reivindicado la recuperación del núcleo histórico para la ciudadanía.
Una de las novedades implementadas es el establecimiento del límite de velocidad en 30 km/h en todo el núcleo histórico delimitado por la avenida del General Avilés, al norte; la calle de Rascanya, al este; la plaza de Badajoz y las calles del Baró de Barxeta y del Bisbe Soler, al sur, y la avenida del Mestre Rodrigo, al oeste.
Para hacerlo posible se ha instalado nueva señalización tanto vertical como horizontal en todas las vías de acceso al centro histórico de Campanar: en las calles del Mestre Bagant, de Mossén Rausell y de Riba-roja y en la avenida del Metge
Vicent Torrent.
Además, igual que se hizo recientemente en Ciutat Vella, se han interrumpido los itinerarios oportunistas de vehículos ubicando tiestos en las calles del Gravador Enguídanos, del Bisbe Soler y del Baró de Barxeta para restringir el tráfico en una zona que, no obstante, ya se había establecido para peatones.
En relación a esto, después de haber observado que una gran cantidad de vehículos emplean el itinerario formado por las calles de Mossén Rausell, de Benidorm y del Metge Vicent Torrent para acortar el paso entre la avenida del Mestre Rodrigo y la calle de Rascanya -frecuentemente a una velocidad inapropiada que genera situaciones de inseguridad-, se ha invertido el sentido de las calles de Benidorm y del Metge Vicent Torrent.
Así, las calles de Mossén Rausell, de Benidorm y del Metge Vicent Torrent pasan a ser de acceso al centro histórico de Campanar y se establece la salida del tráfico de estas vías por la calle del Molí de la Marquesa.
Por otro lado, se han instalado tiestos en el entorno de la calle de Villar del Arzobispo para evitar el aparcamiento de vehículos en zonas no habilitadas al efecto y crear espacios claramente diferenciados para el acceso tanto de los vehículos autorizados como de emergencia.
“Con toda esta intervención damos respuesta a una reivindicación histórica de los vecinos y vecinas de Campanar para recuperar para la ciudadanía este barrio histórico y facilitar la accesibilidad y una mejora de la seguridad vial, igual que ya hemos hecho en otros barrios de la ciudad”, ha afirmado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi.
Nuevo paso de peatones en Pío Baroja
En paralelo a la intervención descrita, también se ha atendido otra petición vecinal durante mucho tiempo y se ha creado un nuevo paso de peatones regulado con semáforo con pulsador –tanto para peatones como para ciclistas- en la avenida de Pío Baroja, a la altura del camino del Cementeri y del acceso al camino de la Partida de Dalt.
Con esta intervención, ha añadido el edil, se da solución a la petición vecinal, dado que por fin se resuelve el problema de no contar con ningún paso de peatones en un tramo de la avenida de Pío Baroja de casi 700 metros, entre la calle de La Safor y la avenida del General Avilés.