Así es el nuevo estadio que propone el Valencia CF: sin revestimiento exterior, con bajos para comercio de proximidad y con una 'fan zone'

El alcalde de València, Joan Ribó, se reunió este martes el presidente del Valencia CF, Anil Murthy, quien presentó al primer edil el esbozo del proyecto del nuevo estadio que pretenden llevar adelante así como el plan para financiarlo.

Al término del encuentro, Ribó comentó algunos detalles avanzados el pasado 30 diciembre por elDiario.es sobre el futuro coliseo como por ejemplo la idea de recubrir toda la cubierta con placas fotovoltaicas, el aforo que irá de 45.000 a 53.000 espectadores en una primera fase, ampliables hasta 63.000 o el calendario que maneja el club para reactivar las obras en octubre del presente año y finalizarlas en agosto de 2024.

Sin embargo, además de estas cuestiones, según diversas fuentes consultadas por este diario, el proyecto incluye otros aspectos a tener en cuenta. En el puramente estético, el diseño exterior del recinto será más bien austero al renunciar definitivamente al revestimiento exterior previsto en el proyecto original, por lo que desde fuera, a pie de calle, visualmente diferirá poco de la imagen actual, con el añadido de la cubierta que sí le dará una imagen moderna y cambiando el actual aspecto de abandono por el de una infraestructura totalmente renovada.

Así pues, la apuesta innovadora y estéticamente más atractiva se concentra en el interior del recinto y especialmente en ese segundo anillo dedicado a la hostelería y al ocio, compatibilizándolo con la actividad deportiva.

Además, se renuncia al concepto de centro comercial en los bajos del estadio (franquicias), un modelo que desde el club consideran agotado, por lo que se apostará más por un modelo de comercio de proximidad vinculado al barrio de Benicalap para explotar los locales comerciales.

Junto al estadio, se construirá una 'fan zone' de 6.000 metros cuadrados como una gran plaza peatonal que sirva de encuentro para los aficionados y dos bloques de terciario con 40.000 metros de edificabilidad que podrían destinarse a oficinas o a un hotel.

Como comentó el propio Ribó tras la reunión, el segundo anillo del estadio está planteado como una zona abierta de forma permanente, donde puede haber restaurantes, por ejemplo, y que permite ampliar el aforo de las instalaciones.

El alcalde se mostró satisfecho con la concreción de los compromisos adquiridos por el club (inicio de obras entre septiembre y octubre del presente año y finalización en agosto de 2024), a la espera de que remita toda la documentación requerida para poder tramitar los diferentes permisos de obras, especialmente el proyecto constructivo y los avales económicos, también solicitados por la Generalitat Valenciana para que el club pueda mantener los beneficios urbanísticos incluidos en la Actuación Territorial Estratégica (ATE) que está en fase de caducidad

Al respecto, el club comentó en el transcurso de la reunión que tienen idea de presentar toda esta documentación entre los meses de febrero y marzo y de alegar al expediente de caducidad de la ATE abierto el pasado mes de noviembre, cuando al club se le dio un plazo de 90 días hábiles que finalizan en el mes de abril para que garantizara la finalización del coliseo para conservar las mencionadas ventajas urbanísticas.

Por su parte, la vicealcaldesa de València y edil de Desarrollo y Renovación Urbana, la socialista Sandra Gómez, pidió este martes que el nuevo campo de fútbol del Valencia CF no sea más pequeño que el actual Mestalla y rechazó así un futuro estadio “low cost”, con menor capacidad.

La responsable municipal subrayó que el club deportivo “se merece tener un estadio de primera” que “cumpla las expectativas de la afición” y ha solicitado que tras años esperando un nuevo estadio su construcción no se resuelva “mal” y con una respuesta “muy insatisfactoria”.

115 millones de inversión

La finalización del nuevo estadio está valorada en 108,2 millones de euros, más los 6,8 millones del polideportivo de Benicalap, con lo que el coste total de ambas infraestructuras asciende a 115 millones.

El club tiene previsto financiar las obras con los 80 millones del crédito del fondo de inversión CVC, más la venta de los 40.000 metros cuadrados de suelo terciario de la actual parcela de Cortes Valencianas, en la que se podría ubicar un hotel u oficinas.

Además, se espera que el reinicio de las obras fomente también el interés de la venta de la parcela del viejo Mestalla ante la perspectiva de que finalmente el actual campo acabará quedando liberado. El club también tiene prevista la venta de su actual sede social y la obtención de recursos procedentes de la explotación de los palcos, naming y la zona comercial y de ocio que habrá en el interior del coliseo.