Receta MacGyver: cómo hacer una barra de pan con bicarbonato y limón cuando no queda levadura. Como a levadura sigue escaseando en panaderías y tahonas, hay que buscar remedios creativos, tirar de nuestros conocimientos de química básica y pensar reacciones inocuas que generen el gas necesario para hacer subir la masa de harina, agua y sal.

Una idea es usar levadura química para repostería, que se vende en supermercados, no obstante puede que con la actual fiebre por fabricar bizcochos (aquí te damos unas cuantas recetas) también se haya agotado en los establecimientos más céntricos de las principales ciudades del país. Si este es nuestro caso, no debemos alarmarnos, hay soluciones, siempre que tengamos que lo que vamos a hacer es un pan de emergencia, de salir del paso.

Una de ellas es usar bicarbonato y zumo de un limón. ¿Por qué? Porque en esencia la levadura química es esto: bicarbonato y tartrato más algo de fécula seca de patata o harina de maíz, que nos garantizan que la mezcla se mantendrá seca y no reaccionará. El tartrato, una sal del ácido tartárico, hará de reactivo ácido, equivalente al zumo de limón, y el bicarbonato de reactivo básico.

La unión de ambos en un medio acuoso propicia su recíproca neutralización hasta agua y anhídrido carbónico en forma de gas. Precisamente este gas es el que ansiamos encerrar dentro de la masa de pan para que nos la estire por dentro y esponje, tal como haría la levadura fermentando la harina, de modo que al ponerlo al horno gane volumen y nos dé un buen resultado. 

No, no se trata de una elucubración ebria de nuestra mente, producto del largo confinamiento; es casi la misma receta con que se hace el pan de soda irlandés receta con que se hace el pan de soda irlandés, que da un pan de hogaza denso, que se pega al paladar, pero que sirve para tener qué untar en el pisto o el estofado, y que con aceite y sal, y tomate, soporta de maravilla una tortilla como las que te recomendamos en este artículo. Incluso nos durará hasta la mañana siguiente para untar mantequilla salada y unas cucharadas de extracto de levadura de Guinness. La única diferencia es que el pan de soda irlandés se hace con leche o con suero de nata agria.

Receta para pan sin levadura con bicarbonato y limón

Precisaremos de:

Preparación de la masa

Precalentamos en horno a 200ºC por arriba y abajo y con el ventilador encendido.

Pesamos y añadimos la harina a un bol, junto con el bicarbonato y la sal.

Mezclamos con movimientos envolventes durante unos minutos.

En otro bol o plato hondo, vertemos el agua y el zumo de limón.

Con un colador tamizamos la mezcla de la harina sobre el bol con el agua y el zumo. La ideal es que la mezcla de harina y bicarbonato lo cubra todo y evite en un primer momento la reacción ácido base que desprenderá el gas.

Una vez tamizado, con las manos mojadas, amasamos la harina de modo que se mezcle con el líquido hasta formar una masa uniforme que veremos que tiende a hincharse.

Espolvoreamos una tabla de marera o la encimera de la cocina con un poco de harina y dejamos ahí la masa. La amasamos unos minutos hasta que coja toda la harina y le damos la forma que queramos. Nosotros le hemos dado alargada, pero puede ser redonda.

Esperamos unos diez minutos a que la masa se hinche un poco. Le podemos dar unos cortes en las superficie.

Metemos el pre-pan en el horno ya calentado y lo dejamos 30-35 minutos, poniendo un poco de agua en la bandeja inferior.

Pasado este tiempo abrimos el horno, sacamos el pan y dejamos enfriar sobre una rejilla. A nosotros nos ha quedado la miga amarilla, pero si usáis leche os quedará más pálida. 

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