Todo el mundo sabe que la base del guacamole, un plato de origen mexicano, es el aguacate, acompañado por el tomate, la cebolla y el cilantro, además de diferentes especias y aderezos.
Al menos así debería ser... porque actualmente en no pocas taquerías de México y de la frontera con Estados Unidos, el aguacate se ha sustituido por otros ingredientes, dando lugar al “falso guacamole” o “#nomole”, como se le conoce en las recetas que se publican en Twitter e Instagram.
Lo cierto es que no se trata de una práctica novedosa: según informa la BBC en un reportaje de 2019, desde hace tiempo no pocas “taquerías chilangas” (de México DF) han sustituido el aguacate por otro ingrediente en razón principalmente del ahorro económico, pues es una fruta muy cara para los comercios más modestos.
A este respecto, hay que señalar que el guacamole es muchas veces una salsa que se regala gratuitamente con los nachos durante la espera de los tacos, por lo que el coste del aguacate sería todavía más gravoso.
Además, el aguacate es un producto que no es fácil de conservar fuera de su clima natural, ya que es muy sensible al frío pero al calor madura muy rápido y se estropea. Por otro lado, una vez abierta la fruta, su pulpa se oxida con facilidad.
Por lo tanto, los empresarios del Distrito Federal y de las regiones fronterizas han optado por sustituir el aguacate por un ingrediente mucho más asequible y de mejor conservación, como es el calabacín (Cucúrbita pepo), que en México se conoce coloquialmente como “calabacita”.
También en la página web de gastronomía mexicana Gastrolabweb se explica que “la salsa verde tiene un montón de maneras para prepararse y sirve para aderezar taquitos y de hecho el falso guacamole es más común de lo que muchos pensaríamos, por lo que se acostumbra poner sobre los tacos dorados, rellenos de pollo”.
Receta del falso guacamole
Hay muchas maneras de preparar el falso guacamole, que se conoce también como salsa verde, para diferenciarla de otras salsas conocidas como mole y que se hacen en base a tomate que va fermentando.
En este caso se sustituye el aguacate por calabacín hervido al punto justo, junto con tomate pelado y sin semillas. Una vez hervidas las dos piezas se mezclan opcionalmente con chalotas, ajos, cebollas y especias varias como el ají, así como hojas de cilantro, etc. A gusto de cada receta. Y se adereza con limón además de mezclar con agua o caldo de pollo.
Existen otras recetas que sustituyen el calabacín por guisantes machacados, un puré típico por cierto del Reino Unido conocido como mushy peas. Se mata el dulce característico con especias, cilantro y zumo de limón. Otras recetas incluyen brócoli.
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