Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Oprah Winfrey empodera a las mujeres del mañana en un discurso para la historia

Mónica Zas Marcos

Muchas hablaron en la alfombra roja, reivindicaron sus ropajes negros en contra de la violencia sexual y se llevaron su discurso al atril de los Globos de Oro. Pero solo una consiguió una larga ovación por parte de todos los asistentes al acto, y no podía ser otra que Oprah Winfrey.

La presentadora fue galardonada con el premio Cecille B. DeMille por su trayectoria en el cine y en la televisión, en la ficción y en la realidad de su plató. “Los abrazos de Oprah acaban con las guerras y consiguen la paz mundial. Todo el mundo quiere a Oprah”, adelantaba Reese Witherspoon, con la que coincidió en el rodaje de Un viaje en el tiempo. Y, como un mantra, todo Hollywood se puso en pie para aplaudir a la veterana periodista y actriz después de su discurso, el más largo y maravilloso de la noche.

“En 1982, Sidney [Poitier] recibió el premio Cecil B. DeMille justo aquí en los Globos de Oro y, no en vano, hay niñas viendo cómo me convierto en la primera mujer negra en recibir este mismo galardón. Es un honor y es un privilegio compartir la velada con todas ellas”, comentó Winfrey sobre su primera inspiración.

“Quiero expresar mi gratitud a todas las mujeres que han soportado años de abuso y agresión porque, al igual que mi madre, tuvieron hijos que alimentar, facturas que pagar y sueños que perseguir”, continuó la periodista para introducir el relato más conmovedor de la noche.

“En 1944, Recy Taylor era una joven esposa y madre que volvía a casa después de un servicio religioso en Alabama. De camino fue secuestrada por seis hombres armados blancos, violada y abandonada con los ojos vendados en la carretera. Amenazaron con matarla si alguna vez se lo contaba a alguien. Pero su historia fue denunciada a la NAACP, donde una joven trabajadora llamada Rosa Parks se convirtió en la investigadora principal de su caso y juntas buscaron justicia.

Pero la justicia no era una opción en la era de Jim Crow. Los hombres que intentaron destruirla nunca fueron perseguidos. Recy Taylor murió hace diez días y vivió como todas nosotras, demasiados años en una cultura destruida por hombres brutalmente poderosos.

Durante demasiado tiempo, las mujeres no eran escuchadas o tomadas en serio si se atrevían a oponerse al poder de esos hombres. Pero su tiempo ha llegado. Time's Up“, ha dicho haciendo un guiño a la iniciativa formada por 300 de las actrices más poderosas de Hollywood. Todas ellas han reunido miles de millones para crear un fondo de defensa legal para aquellas mujeres sin recursos que sufran acoso laboral y no estén en condiciones económicas de llevarlo a los tribunales.

Un grito de esperanza

Oprah Winfrey ha interpelado a todos los hombres que quisieron escuchar, a las Rosa Parks que arriesgaron su bienestar físico por defender sus principios en el asiento de un autobús y a las nuevas generaciones, a las que espera que se les abra un horizonte más amable y “en el que no haga falta volver a pronunciar me too”.

“He entrevistado y retratado a personas que han vivido algunas de las cosas más feas que la vida puede depararnos. Pero la única cualidad que todos compartían era la capacidad de mantener la esperanza de un mañana más brillante, incluso durante nuestras noches más oscuras. Así que quiero que todas las niñas que están viendo esto sepan que un nuevo día se abre en el horizonte”, clamaba la presentadora a la par que el auditorio se ponía en pie.

“Cuando ese día amanezca, será gracias a muchas mujeres magníficas, de las cuales algunas hoy están en esta sala”, concluía, mientras la cámara enfocaba a Reese Witherspoon, Greta Gerwig, Nicole Kidman, Jessica Chastain y muchas otras que han conseguido que esta velada pase a la historia como la más feminista de los Globos de Oro.

Etiquetas
stats