La UE acuerda reforzar Frontex hasta los 10.000 guardias en 2027 con capacidad para intervenir en terceros países
“No se pueden buscar soluciones ad hoc cada vez que llega un buque. Necesitamos una solidaridad más duradera y organizada, necesitamos más eficiencia. Por eso, proponemos un reforzamiento de la guardia costera y de fronteras, financiado por el presupuesto comunitario, que se aumente en 10.000 efectivos hasta 2020”. Así se expresaba el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en septiembre durante el Debate sobre el Estado de la UE.
Siete meses después, el aumento en personal de Frontex no será en 2020, sino siete años más tarde, en 2027. A pesar de ello, el Ejecutivo comunitario ha expresado este lunes satisfacción.
El comisario de Asuntos de Interior, Migración y Ciudadanía, Dimitris Avramopoulos, ha dicho: “De ahora en adelante, la Guardia Europea de Fronteras y Costas tendrá toda la capacidad operativa y los poderes necesarios para apoyar de manera efectiva a los Estados miembros en la tarea de vigilancia de las fronteras externas, la lucha contra la migración irregular, la realización de retornos y la cooperación con terceros países. En última instancia, esto también ayudará a preservar la viabilidad a largo plazo del espacio de libre circulación de Schengen”.
La eje central del Frontex reforzado, aprobado este martes en el Parlamento Europeo con los votos de socialistas, populares y liberales, será un cuerpo permanente de 10.000 guardias de fronteras, listos para apoyar a los Estados miembros en cualquier momento. La agencia también tendrá un mandato más fuerte sobre los retornos y cooperará más estrechamente con los países no pertenecientes a la UE, incluidos aquellos más allá de la vecindad inmediata de la UE, explica la Comisión.
La eurodiputada de IU en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, ha acusado al PSOE de “rendirse a las políticas racistas de la UE” con su apoyo a la reforma de la Guardia Europea de Fronteras y Costas:
“La nueva Guardia Europea de Fronteras y Costas representa un cambio radical en la capacidad de la UE para proteger colectivamente mejor las fronteras exteriores de Europa”, afirma el Ejecutivo comunitario al describir las características del cuerpo:
Un cuerpo permanente de 10.000 guardias de fronteras: El cuerpo permanente reunirá al personal de la agencia, así como a los guardias de fronteras y a los expertos en devolución adscritos o desplegados por los Estados miembros, que apoyarán a los más de 100.000 guardias de fronteras nacionales en sus tareas. Además, la agencia tendrá un presupuesto para adquirir su propio equipo, como buques, aviones y vehículos.
Poderes ejecutivos: El cuerpo permanente podrá realizar tareas de control y devolución de fronteras: controles de identidad, autorización de entrada en las fronteras exteriores y vigilancia de fronteras con el acuerdo del Estado miembro.
Más apoyo en el retorno: Además de organizar y financiar operaciones de retorno conjuntas, Frontex ahora también podrá apoyar a los Estados miembros en todas las etapas del proceso de retorno, y los Estados miembros seguirán siendo responsables de tomar decisiones de retorno. Este apoyo incluirá, por ejemplo, la identificación de nacionales de países no pertenecientes a la UE sin derecho a quedarse o adquirir documentos de viaje.
Cooperación más estrecha con países no pertenecientes a la UE: Frontex podrá, previa aprobación del acuerdo del país en cuestión, lanzar operaciones conjuntas y desplegar personal fuera de la UE, más allá de los países vecinos de la UE, para la gestión de fronteras y migración.
Centros de radio control: la agencia podrá establecer oficinas de control en los Estados miembros y en un país que no sea miembro de la UE (sujeto a un acuerdo) para respaldar logísticamente sus actividades operativas.
La Comisión de Libertades del Parlamento Europeo todavía tiene que confirmar el acuerdo político alcanzado en trílogos el 28 de marzo entre Consejo, Parlamento y Comisión. A partir de ahí, la Eurocámara y el Consejo deberán adoptar formalmente el reglamento.