Los bancos españoles ya valen 21.000 millones más en Bolsa que antes de la pandemia

A comienzos de marzo del año 2020, ocho bancos españoles cotizaban en la Bolsa. Seis de ellos en el Ibex 35 y dos en el mercado continuo. Poco más de año y medio después, la cifra ha menguado a seis (cinco en el Ibex), por las dos fusiones que se han producido en este ejercicio. Entonces, el valor conjunto de aquellos ocho bancos rondaba los 108.000 millones de euros, tomando como referencia comienzos de marzo de 2020, días antes de que estallara el crash bursátil que se produjo a partir del día 9. Hoy, 19 meses después, son 21.000 millones más sumando los seis que siguen adelante tras la concentración. Y con un desplome histórico durante 2020 de por medio.

Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell, Bankinter y Unicaja componen la media docena de entidades mejor cotizadas en España. Otros grupos relevantes como Ibercaja, Kutxabank o Abanca continúan fuera del mercado bursátil, por lo que no es tan sencillo conocer el valor de mercado que tienen. Los seis que sí figuran en la Bolsa española suman una capitalización de 129.000 millones, lo que supone no solo haber recuperado el valor perdido durante la pandemia sino situarse ya más de un 14% por encima. Este mismo martes han acaparado cinco de las seis mejores actuaciones en Bolsa.

BBVA ha sido la entidad que más ha aumentado su valor respecto al periodo anterior al estallido de la crisis sanitaria, al incrementar el 50% sus acciones. Le sigue CaixaBank, con un 22%. Unicaja ronda una mejora del 10% frente a marzo de 2020, mientras que Bankinter y Santander rondan una mejoría del 5%. Sabadell es la única que está por debajo de aquel nivel prepandemia. Los analistas han apuntado que las perspectivas de una subida de tipos de interés, la vuelta de los bancos al dividendo o los planes de recortes de costes han permitido que estos valores se recuperen.

Los problemas de la banca en Bolsa venían de antiguo y no fueron únicamente motivados por la pandemia. Las dudas de rentabilidad y de negocio hacían que el valor de las entidades cotizadas se encontrasen sensiblemente por debajo de sus mejores tiempos. A ello se sumó la crisis provocada por la pandemia, que situó en Bolsa a la banca como uno de los sectores más castigados por los inversores. A los problemas que ya se arrastraban se añadieron los fuertes ajustes que se hicieron para guardar provisiones, el temor a un aumento de la morosidad o que los tipos de interés fuesen a mantenerse en negativo durante más tiempo del esperado.

A estos argumentos que lastraban al sector en Bolsa se sumaba uno más, muy lamentado por sus gestores: la prohibición de dividendos. Durante el último año las distintas entidades lamentaron que el hecho de que el BCE impidiera que se pudiera retribuir al accionista, como una herramienta para dirigir ese exceso de capital a la financiación de la economía en un momento de crisis, castigaba al valor de los bancos más que al de otros sectores de la Bolsa. Finalmente esa medida se levantó parcialmente a principios de año y definitivamente hace unos días. De hecho, grandes grupos como Banco Santander o BBVA no han tardado en anunciar sus planes para retribuir a sus inversores.

Con aquellos mimbres, los bancos cerraron el año 2020 con pérdidas de valor históricas. Sabadell fue el peor de ellos, perdiendo un 65%, afectada por otros problemas añadidos, como el fracaso de las negociaciones para la fusión con BBVA. Bankinter y Santander también perdieron más de un 30%, BBVA en torno a un 20% y CaixaBank y Bankia, pese al avance que supuso la fusión se dejaron en 2020 alrededor de una cuarta parte de su valor en el mercado. De hecho, el escaso valor de la entidad rescatada fue una de las motivaciones del Estado para impulsar su fusión con CaixaBank.

Esta situación que afectó a los bancos españoles tuvo una consecuencia sobre el conjunto de la Bolsa. Un informe presentado por BME, la empresa que gestiona el mercado de valores en España, a finales del año pasado ponía de relevancia que la banca había perdido su tradicional trono como el principal sector en la Bolsa del país. El sector energético, suponiendo casi una cuarta parte del valor bursátil en España al cierre de 2020, superó al textil —fundamentalmente Inditex— con un 14%. La banca pasó de aglutinar el 20% a quedarse en algo más del 12%.

Dos años antagónicos

Pero 2021 está siendo otro escenario muy distinto para la banca española. Ha pasado de ser uno de los sectores más castigados a protagonizar algunas de las subidas acumuladas en lo que va de año en el selectivo bursátil español. Cuatro de los diez valores que más crecen en lo que va de curso son bancos. Y, precisamente, quien protagonizó en 2020 la mayor caída del Ibex 35, Sabadell, encabeza actualmente la evolución anual del selectivo español, al haber duplicado su valor desde el 1 de enero.

Bankinter, que fue el segundo valor bancario más castigado en 2020, ahora tiene un valor un 56% superior al que tenía al arranque del año, siendo la tercera mayor subida de todo el Ibex 35 y pese a haber segregado su filial aseguradora Línea Directa, que ahora cotiza independientemente en Bolsa con un valor de 1.800 millones. BBVA se anota una subida del 50% este curso.

La siguiente mayor subida es la protagonizada por Banco Santander. El grupo que preside Ana Botín ha incrementado algo más del 29% el valor de sus acciones en 2021. Este avance le ha servido para recuperar su segunda posición entre las empresas españolas por capitalización. La primera, destacada, es Inditex, con un valor que ronda los 100.000 millones de euros. Santander superó este martes a Iberdrola en la segunda posición al alcanzar los 56.200 millones de euros, unos 500 millones más que la eléctrica, que le arrebató esa posición a comienzos de 2020. Iberdrola, en plena batalla con el Gobierno por la tarifa de la luz, pierde en lo que va de curso el 22% de su valor en Bolsa

CaixaBank también se ha anotado un incremento del 29% en el valor de sus acciones desde que comenzara el año. Hay que recordar que el grupo que preside José Ignacio Goirigolzarri absorbió en Semana Santa a Bankia. Por separado, ambos sumaban una capitalización de algo menos de 17.500 millones de euros justo antes de que estallara la pandemia. Ahora, ya unidas, su valor en Bolsa es de 21.530 millones. El 16% de esa cantidad, unos 3.400 millones, es el valor de la participación del Estado en la entidad. Pese al avance de más de un 70% del valor de los títulos estatales en banca, primero en Bankia y ahora en CaixaBank, la cifra sigue lejos de los 20.000 millones pendientes de recuperar del rescate del banco en 2012. La otra entidad fusionada este año, Unicaja, que acaba de absorber a Liberbank, ha aumentado un 25% su valor en 2021.