El Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha propuesto al Ministerio para la Transición Ecológica la apertura de un expediente sancionador al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), un Organismo Público de Investigación adscrito al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, por una infracción “grave” de la normativa de protección física de fuentes radiactivas.
Fuentes conocedoras del procedimiento explican que se trata de un problema relacionado con la vigilancia de material radiactivo en las dependencias del Ciemat en su sede central en la Ciudad Universitaria de Madrid, un complejo de más de 71.000 metros cuadrados de superficie en el distrito de Moncloa.
Según el acta del pleno del CSN del pasado 24 de julio, el organismo de investigación “ha incurrido en incumplimientos del marco regulador de Protección Física” de fuentes radiactivas recogido en el Real Decreto 1308/2011 y en la Instrucción IS-41, de 2016, que regula los requisitos sobre protección física en lo relativo “a las fuentes de categoría 1, 2 y 3 utilizadas/almacenadas en las instalaciones radiactivas del centro”.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) divide las fuentes radiactivas en cinco categorías, del 1 al 5, según su peligrosidad (la 1 es la más peligrosa). Las instalaciones en las que se produzcan, procesen, manipulen, utilicen o almacenen fuentes de categoría 1, 2 y 3 deben disponer de un plan de protección física para la prevención de posibles amenazas y actos de sabotaje que deben visar el propio CSN y el Ministerio de Interior.
Según el acta del CSN, la Dirección Técnica de Protección Radiológica del organismo ha concluido “que la infracción se puede calificar como grave”. Este tipo de infracciones están recogidas en el artículo 86 de la Ley 25/1964 sobre Energía Nuclear, que tiene una amplia casuística de conductas sancionables. El CSN declina comentar el expediente, mientras que el Ciemat y el Ministerio para la Transición Ecológica señalan que todavía no han recibido comunicación oficial del mismo.
Casi todos los asuntos del CSN (seguridad nuclear, emergencias, sucesos, incidentes, transporte de material radiactivo) están, por ley, sujetos a transparencia y detalle en la documentación explicativa que debe publicar el organismo. Pero los procedimientos relacionados con la seguridad física en instalaciones radiactivas, que han cobrado creciente protagonismo en los últimos años en paralelo a la preocupación por el incremento del terrorismo internacional, se tratan de manera confidencial. Por eso, no hay detalles en la documentación sobre las causas de la propuesta de sanción.
Escape en los 70
El Ciemat tiene autorización de funcionamiento del CSN como instalación nuclear para dependencias que incluyen algunas que están obsoletas o paradas y en fase de desmantelamiento y otro grupo formado por instalaciones radiactivas que siguen operativas.
El organismo es heredero de la antigua Junta de Energía Nuclear (JEN) que desde su creación en 1951 lideró la investigación, el proceso de producción y el control institucional de la energía nuclear de fisión en España. En noviembre de 1970, ese organismo protagonizó un escape radiactivo que intentó silenciar la dictadura de Francisco Franco y que acabó contaminando los ríos Manzanares, Jarama y Tajo. Aún hoy, el complejo de Moncloa registra año a año dosis de radiación que, aun inofensivas, superan las del entorno de las centrales nucleares en funcionamiento.
Ya en la década de los 80, la JEN se abrió a nuevas alternativas energéticas y al estudio aplicado del impacto ambiental de la energía. Entre otras instalaciones del centro, destacaron en su día los reactores nucleares de investigación, los aceleradores de partículas, las celdas calientes, las plantas de fabricación de combustible nuclear y las plantas de procesado.