UGT investiga una presunta trama de corrupción interna por el desvío de “más de un millón de euros”

Investigación abierta sobre un presunto caso de corrupción interna en UGT Madrid, de un alcance de “más de un millón de euros” que habrían sido detraídos de la propia organización, apuntan fuentes del sindicato a elDiario.es. Se trata de un caso con muchos interrogantes todavía, que se ha saldado este martes con la dimisión del líder de la organización en Madrid, Luis Miguel López Reillo, que fue quien denunció hace varios días los hechos ante la policía, como adelantó este fin de semana El Mundo. Ha trascendido la identidad solo de una de las trabajadoras del sindicato denunciada, una administrativa: la hija de la diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid Carmen López, que en el pasado tuvo responsabilidad en UGT. Después de que trascendiera públicamente la trama, el sindicato han presentado información sobre el caso ante la Fiscalía de Madrid por Delitos Económicos.

“Hoy mismo la Comisión Gestora de UGT Madrid ha presentado un escrito ante la Fiscalía de Madrid por Delitos Económicos, por una presunta estafa ejercida contra el sindicato”, apuntan fuentes del sindicato a nivel estatal. Esta información “amplía” la aportada supuestamente por López Reillo ante la Policía Judicial de Madrid, indican desde UGT Confederal.

La trama fue detectada por el propio sindicato, explican en la organización que lidera Pepe Álvarez, y se trataría de una estafa interna por parte de personal de UGT Madrid mediante la que habrían extraído “fondos de UGT Madrid” de forma ilegítima. Los hechos detectados corresponden a “2020 y 2021” y la cuantía estimada a nivel interno es “de más de un millón de euros”, explican fuentes del sindicato. “Pero puede ser bastante más”, reconocen.

Simulación de pagos del Fogasa

La maniobra utilizada consistiría en la simulación de abonos del Fogasa a trabajadores mediante los que los involucrados en la estafa desviaban fondos del sindicato para apropiarse de ellos, según la investigación interna del sindicato. Esta comenzó “hace algunas semanas” y se encargó a “un investigador externo y a una auditoría externa”. En UGT estatal indican que al corriente del caso estaban tanto el sindicato confederal como la dirección de Madrid.

Desde UGT subrayan que “no hay fondos del Fogasa defraudados, ni trabajadores afectados” por esta práctica, sino que la estafa utilizaba supuestos pagos de este tipo como pretexto para apropiarse fondos de la organización sindical. “El estafado es el sindicato”, insisten. Según UGT, la trama solo alcanza a la organización en Madrid, según los datos recabados, aunque la investigación interna “sigue abierta”.

UGT, como una de las organizaciones de trabajadores más representativa, recibe tanto fondos a través de sus cuotas de afiliados y afiliadas como subvenciones públicas.

Una trabajadora señalada, una dimisión y dos denuncias

La historia, que ya está en manos de la policía y de los tribunales, tiene aún muchos interrogantes abiertos y algunos hechos llamativos. A falta de saber cuántas personas del sindicato están involucradas en esta trama y su alcance, solo ha trascendido un nombre del personal denunciado: una administrativa, hija de la diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid, Carmen López, que ostentó cargos de responsabilidad en el sindicato a nivel estatal y en el de Madrid antes de iniciar su carrera política. Esta comenzó en 2015, cuando se sumó a las listas de Ángel Gabilondo en las elecciones autonómicas.

Este medio ha podido contrastar por varias fuentes que esta trabajadora es una de las afectadas por la investigación interna y también la denunciada ante las autoridades. elDiario.es ha preguntado a UGT si hay más trabajadores del sindicato investigados, dada la alta cuantía supuestamente detraída, pero no ha querido responder al respecto, recordando siempre que “se debe respetar la presunción de inocencia”. El sindicato “ha tomado medidas” respecto al personal afectado por la investigación, sin concretar si alcanza a alguien más que a esta trabajadora.

Más allá de esta trabajadora, es destacable que el denunciante del caso ante las autoridades, Luis Miguel López Reillo, haya dimitido. En el sindicato estatal normalizan su paso atrás, ya que destacan que estaba al frente del sindicato cuando los hechos ocurrieron y es una manera de dar trasparencia a la investigación.

Pero, además, también es llamativa la presentación de la denuncia de López Reillo en solitario ante la Policía y, por otro lado, que la Comisión Gestora que le sustituye haya presentado por su parte la información de que dispone ante la Fiscalía. Luis Miguel López Reillo no ha respondido a las preguntas de este medio sobre si el sindicato era conocedor de su denuncia ni sobre la causa de su dimisión tras denunciar los hechos, para lo que remite a una publicación en su perfil de Facebook en la que confía en las “investigaciones policiales para esclarecer los hechos”.

“La Comisión Ejecutiva Confederal de UGT”, es decir la dirección con Pepe Álvarez a la cabeza, “las federaciones y la Comisión gestora están actuando internamente para esclarecer los hechos, pondrá en manos del juzgado todas las pruebas de que dispone contra esta trama y trabaja para continuar dando la respuesta sindical debida en la Comunidad de Madrid”, indican desde el sindicato a nivel estatal.