Reptiles, aves exóticas y pequeños mamíferos: cuidados esenciales en verano
Los consejos para que el cuidado de nuestras mascotas sea el mejor en la época de verano suelen centrarse en los animales domésticos más comunes —perros y gatos— pero en los últimos años ha crecido el número de hogares con mascotas exóticas, como reptiles, aves y pequeños mamíferos, que son particularmente susceptibles a los efectos del calor. Estos animales a menudo provienen de hábitats con condiciones ambientales muy distintas a las que enfrentan en un hogar, algo que puede agravar los problemas relacionados con la deshidratación.
Las expertas Marina Domínguez y María Soledad Trigo, responsables del Servicio de Medicina Interna y Área de pequeños animales y del Servicio de medicina y cirugía de animales exóticos y salvajes del Hospital Clínico Veterinario de la Universidad Alfonso X el Sabio, señalan una serie de consejos para cuidar de mascotas exóticas y pequeños mamíferos este verano.
Los más básicos empiezan en el control de temperatura del entorno para animales exóticos que viven en terrarios y jaulas, con termómetros y ajustes de calefacción o refrigeración según sea necesario. También la proporción de un refugio fresco donde puedan escapar del calor, y el monitoreo regular de salud para detectar cualquier signo de estrés por calor, como letargo, apetito caprichoso o disminución del tamaño y número de sus heces. Si notas alguno de estos síntomas, acude a un veterinario especialista de inmediato, como los que encuentras en el Hospital Clínico Veterinario de UAX, que cada año atiende a 9.000 pacientes y que recientemente ha inaugurado una UCI que da servicio a pacientes críticos (caninos y felinos) 24/7 todos los días del año.
El baño e higiene de un animal exótico en verano
El baño a un animal exótico puede provocar accidentes por su tendencia a la huida y la dificultad de su manejo, por lo que no es aconsejable salvo que sea realmente necesario. Sin embargo, señala Maria Soledad Trigo, “se aconseja el cepillado diario de los mamíferos exóticos que permitan su manejo y podemos acondicionar baños para las aves y reptiles y que ellos puedan remojarse e hidratarse cuando quieran”.
Para aumentar la humedad, podemos ayudarnos con bañeras para reptiles que tienen una superficie amplia y poca profundidad, y colocarlas sobre una manta térmica o bajo un foco de calor para lograr la evaporación del agua, y acompañar con plantas naturales que ayudan a elevar la humedad relativa del terrario. “Las aves también pueden disponer de una bañera y verás cuánto disfrutáis todos del espectáculo que montan las aves durante sus baños”, comenta Marina Domínguez. Las aves de pequeño tamaño necesitan una zona de refresco, aprovechando para colocar un recipiente de baja altura lo suficientemente grande para que puedan bañarse, acicalarse y arreglar sus plumas.
Para mantener a tu reptil en óptimas condiciones, se recomienda el sistema de lluvia o niebla programado cada cierto tiempo en función de la humedad necesaria para cada especie.
Comida e hidratación para combatir el calor
Cuando hablamos de la hidratación de estas especies, el control es una de las cuestiones claves para poder adecuar los cuidados. El clima seco de varias provincias de España, como por ejemplo Madrid, impide mantener una correcta humedad en los terrarios de los reptiles, por lo que se recomienda la utilización de higrómetros para medir inicialmente la humedad relativa. En cuanto a las aves exóticas, las expertas de la Universidad Alfonso X El Sabio señalan que “el consumo de agua varía mucho de una especie a otra. Las que han evolucionado a vivir en zonas desérticas tienen menor consumo, las de origen tropical o psitácidas —familia de aves entre las que se encuentran, entre otras muchas especies, los periquitos, los loros o los guacamayos— necesitan más cantidad de este elemento en la dieta”.
Para mantener la hidratación es además importante ajustar la dieta de las mascotas para asegurarnos que están recibiendo los nutrientes necesarios sin sobrecargar su sistema digestivo. Para aumentar el consumo de agua, debemos ofrecer alimentos húmedos o mojados (comida enlatada o alimentos naturales con alto contenido en agua, como frutas y verduras), en especial en las mascotas que suelen beber poco. “Por ejemplo, los conejos pueden refrescarse con pequeños premios de sandía sin pepitas, y en general los animales exóticos disfrutarán de una buena ración de hojas verdes frescas”. Recuerda que nunca debes ofrecerlas recién sacadas del frigorífico.
También debemos cambiar la rutina de comidas de nuestros animales. En lugar de ofrecer una o dos comidas grandes al día, hay que optar por dar porciones más pequeñas y frecuentes para evitar el malestar digestivo y el sobrecalentamiento, y reducir la cantidad de alimentos ricos en grasas que pueden ser difíciles de digerir, optando por opciones más ligeras y nutritivas. En el caso de las aves, se pueden ofrecer alimentos frescos como bayas y frutas de temporada, adecuadas para su dieta específica, y evitando el aguacate, por su cardiotoxicidad.
La protección solar y la necesidad de refugio
Para mascotas con piel delicada o poco pelaje -como algunos perros o gatos exóticos- se puede utilizar protector solar específico para animales en áreas sensibles como la nariz y las orejas, que puedes encontrar en centros veterinarios.
Además, Maria Soledad Trigo indica también la importancia de la ventilación: “Debemos mantener un flujo de aire constante en los espacios donde habitan nuestras mascotas para evitar el sobrecalentamiento. Los ventiladores y sistemas de aire acondicionado son fundamentales en días extremadamente calurosos”.
Cuidado de las patas de nuestras mascotas
Teniendo en cuenta que la mayoría de los animales exóticos son presas, debemos evitar sacarles de casa y ofrecerles siempre un hogar tranquilo y adaptado a sus necesidades. Pero cuando hablamos de mascotas convencionales, el suelo caliente, como el asfalto, puede causar graves quemaduras en las patas de las mascotas.
Para evitar este problema, hay que evitar sacar a pasear a nuestra mascota durante las horas más calurosas del día, optando por paseos temprano en la mañana o al anochecer, cuando el suelo está más fresco.
Una vez en casa, es importante continuar con la labor de hidratación en esta parte del cuerpo, utilizando bálsamos o cremas hidratantes específicas para mascotas que mantengan las almohadillas de sus patas suaves y protegidas contra las grietas y quemaduras.
Parásitos y leishmaniasis: un peligro en verano
Además, el verano se presenta como una época en la que los parásitos como pulgas, garrapatas y mosquitos están más activos y pueden afectar a nuestras mascotas.
Los antiparasitarios, ya sean en forma de collares, pipetas o comprimidos, protegen a nuestras mascotas contra estos parásitos, pero debemos acompañarlos de una revisión regular para detectar su presencia, prestando especial atención a las áreas de difícil acceso, como detrás de las orejas y entre los dedos, además de mantener su entorno limpio, lavando sus camas y juguetes frecuentemente y aspirando las áreas donde pasa más tiempo para eliminar posibles huevos.
“Los perros con Leishmania también deben protegerse, ya que pueden re-infectarse o ser reservorio para transmitir la enfermedad a otros perros, gatos o humanos”. Además, incide en la necesidad de realizar visitas semestrales en los animales exóticos para realizar análisis coprológicos de rutina y pautas de desparasitación adecuadas.