Un total de 195 titulados extranjeros están a la espera de que el Tribunal Supremo decida sobre la suspensión cautelar de la transferencia a Euskadi de la homologación de títulos de extranjeros. El tribunal decretó la paralización en el mes de julio de este año, apenas unos meses después del acuerdo político para la transferencia, y ha dejado en tierra de nadie a estos profesionales porque la mayoría de ellos tuvieron que anular los expedientes de homologación iniciados en el Gobierno español para arrancar el nuevo proceso en Euskadi y ahora esos expedientes están bloqueados. El consejero de Ciencia, Universidades e Innovación, Juan Ignacio Pérez Iglesias, ha detallado en una respuesta parlamentaria que están paralizados un total de 195 expedientes, que se corresponden con 136 solicitudes de homologación y 59 de declaración de equivalencia.
Interpelado por el parlamentario de EH Bildu Ander Goikoetxea, el consejero señala que “el Gobierno vasco ha continuado trabajando internamente en el estudio de los expedientes, a la espera de la resolución del Supremo”, pero reconoce que no puede hacer nada más que esperar la decisión del tribunal, que es “el órgano competente para decidir sobre la suspensión cautelar”. “Corresponde esperar a conocer la respuesta para adoptar cualquier medida al respecto”, señala.
Indica Pérez Iglesias que el Gobierno vasco se puso en contacto con cada uno de los afectados para explicarles “cuál era la situación” dos días después del auto del Supremo, fechado en el 24 de julio. Pero insiste en que desde el departamento no se puede hacer más que esperar la resolución judicial sobre la competencia.
La sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Supremo suspendió de modo cautelar el decreto estatal que transfería a Euskadi la competencia de homologación de titulaciones extranjeras. El recurso fue interpuesto por la Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid. La suspensión cautelar del decreto dejó en suspenso todas las solicitudes que ya se habían presentado ante la administración vasca.
Esta transferencia entró en el paquete que se acordó con Urkullu como lehendakari en el que se transfirió también la gestión de Cercanías y la acogida de migrantes. El Gobierno vasco daba mucha importancia a esta transferencia por la necesidad de contar con profesionales extracomunitarios para la plantilla de Osakidetza. De hecho, la mayoría de los solicitantes de homologación tienen titulaciones relacionadas con los ámbitos sanitarios.
Las convalidaciones autonómicas iban a ser plenamente válidas no solamente en Euskadi sino en España y en el conjunto de la Unión Europea y el tribunal considera que se deben “extremar todas las cautelas, en particular, las encaminadas a asegurar que se observan pautas homogéneas en la aplicación de las disposiciones generales vigentes”. “De otro lado, no se oculta la trascendencia que para los intereses públicos generales, los que debe preservar el Estado, tiene la garantía de la actuación homogénea en esta materia en toda España, pues trasciende la dimensión meramente educativa, ya de vital importancia por sí sola, y se proyecta sobre la no menos relevante del ejercicio de las profesiones que requieren una determinada titulación universitaria”, agrega.
El mayor problema ahora de estos 195 solicitantes es que para presentar la solicitud de homologación en Euskadi tuvieron que anular previamente la presentada en Madrid, lo que les obligaría a empezar de cero en el caso de que se anulara definitivamente su solicitud en Euskadi. En el mes de agosto sacaron sus reivindicaciones a la calle para pedir ante la subdelegación del Gobierno central el Bilbao que “decisiones burocráticas no arruinen sus vidas” y para hacer hincapié en que Euskadi necesita de profesionales como ellos del sector sociosanitario.
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