La voz etérea de Jane's Addiction transporta a Vitoria a los años 90 en la jornada inaugural del Azkena Rock
El Azkena Rock de Vitoria ha desatado este jueves una 'adicción' al pasado con la perfección y el exquisito sonido de Jane’s Addiction, que a base de ‘riffs’ ha hecho olvidar un arranque marcado por la lluvia en las primeras actuaciones de la jornada inaugural de un festival que ha tenido una nutrida entrada. El aguacero se alargó más de lo esperado y deslució a Brigade Loco, Wispering Sons y Ty Segall, pero no echó atrás a los asistentes. Algunos retaron a la lluvia y otros optaron por resguardarse en el ‘Trashville’, que abrió su segunda sala para dar cobijo a un buen puñado de amantes del rock, según recoge Efe.
Bien entrada la noche, todo se normalizó y Jane’s Addiction dejó claras sus intenciones. La voz etérea de Perry Farrell transportó al público a la década de 1990, a ese rock alternativo que aterrizó en el escenario ‘God’ del Azkena. Parecía que la formación californiana no se había separado nunca, pero la realidad era que los miembros originales volvían a reunirse para demostrar su talento ante un público que entró en calor a medida que los angelinos subían la intensidad.
Desde el primer golpe de guitarra de Dave Navarro, el bolo prometía. El estadounidense surfeó varios temas a base de pasajes en solitario y una gran sintonía con el resto de compañeros que se animaron con varios bises. ‘Whores’ marcó el camino de un trayecto en el que Farrell sumó a su poncho y a su sombrero una botella de vino, consciente de la tierra en la que se encontraba. ‘Jane says’ fue un himno, pero el viaje por ‘Three days’ sacó lo mejor de cada uno. Antes, Tarque rugió con La Asociación del Riff, una banda muy adecuada para el Azkena que regaló momentos de puro rock y tintes ‘heavys’.
‘Bombas en son de paz’ y ‘Heartbreaker’ fueron una declaración de intenciones de un Carlos Tarque avasallador que resolvió con maestría su problema inicial con el micrófono. ‘He vuelto para veros arder’ fue un gran clímax y quiso involucrar al público con ‘Aquí es donde nace el Rock and Roll’, un título que podría ser el lema de un variopinto pero muy marcado Azkena. Mientras tanto, Los Sírex abarrotaban el garaje del Trashville con sus temas más sonados. El día lo cerró la banda sueca Bonafide con su blues eléctrico como contrapunto a Jane’s Addiction que sorprendió a más de un asistente. Fue una de las grandes noticias del primer día.
En la segunda jornada del festival, la de este viernes, le toca el turno a los esperados Queens of the Stone Age, las angelinas L7 y los murcianos Arde Bogotá, entre otros. Además se pondrá el marcha el escenario Love, al que se subirán otras bandas y puestas en escena de menor calado. El rock también saldrá a la calle y a partir de las 13:30 horas, la plaza de la Virgen Blanca del centro de la capital vasca acogerá a Lisa & the Lips.
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