La innovación multiplica sus resultados cuando se produce una colaboración público privada. Es lo que ha pasado con la máquina ADD+PROCESS, que puede acabar revolucionando la industria y el mundo del diseño y la fabricación. Esta máquina es capaz de fabricar prototipos y piezas de grandes dimensiones y de reparar piezas de alto valor para sectores como el de la automoción, el aeronáutico, la máquina-herramienta o el sector energético.
El mecanizado de piezas obtenidas por procesos de adición, en la misma máquina, es una tecnología emergente que se está haciendo un hueco en la actualidad. Esta máquina se convierte en un centro autónomo de producción en el que desde cero se obtiene ya una pieza terminada, un ejemplo de I+D+i aplicada a la industria.
¿Quiénes están detrás de este nuevo ejemplo de investigación y desarrollo aplicado a la industria? La colaboración entre el centro de investigación Tecnalia, el fabricante de máquina-herramienta Ibarmia y la UPV alumbra la primera máquina que combina la fabricación mediante impresión 3D y el mecanizado de precisión para la industria. El proyecto de desarrollo cuenta con el apoyo del Ejecutivo autonómico a través del programa Basque Industry 4.0 gestionado por la SPRI y del Ministerio de Economía y Competitividad dentro del instrumento Retos Colaboración 2015.
¿Qué tecnología se emplea en la producción con esta novedosa máquina? La fabricación aditiva y la impresión 3D son una realidad que revoluciona procesos en múltiples campos y sectores de actividad. El mecanizado de piezas obtenidas por adición es de hecho una tecnología puntera de futuro. Frente a las tecnologías convencionales que se han usado hasta ahora, la tecnología aditiva aporta el material mínimo, lo que implica un ahorro de materiales y energía, que en algunos casos puede llegar al 60%. Frente a la fabricación denominada 'sustractiva' -una de las formas de producción tradicional: partiendo de un trozo de material (metal, madera, etc), se van eliminando capas hasta llegar a la forma deseada-, la fabricación aditiva parte de un material en forma de hilo o polvo que construye una forma tridimensional, depositando este material fundido a partir de un modelo digital.
¿Qué otros beneficios tiene en la producción? El trabajo a escala micro facilita superar los actuales límites que arrastra el diseño actual basado en tecnologías de fabricación menos innovadoras.
Valor añadido final
Una de las búsquedas de la distinción en el proceso de producción industrial es añadir valor al producto final. El proceso logrado por la máquina ADD+PROCESS tiene una gran utilidad en la fabricación de prototipos y piezas únicas, así como en la reparación e incluso recuperación de piezas de muy alto valor. Como se señala desde la propia Ibarmia, “no es brujería, ni magia; es ingeniería, conocimiento, dedicación, talento, ilusión puestas al servicio del desarrollo y la innovación”. “Es trabajo en equipo, integración, coordinación para obtener máquinas impensables”, añaden.
La máquina fue presentada recientemente en un acto en el que participó la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno vasco, Arantza Tapia. La consejera destacó el papel que está jugando el tejido industrial en la recuperación económica y en el empleo, que está sirviendo de locomotora del conjunto del empleo de Euskadi. De hecho, en lo que llevamos de año, el Índice de Producción Industrial arroja un crecimiento acumulado del 3,3% frente a los datos del pasado año.
¿Por qué puede revolucionar la producción? En principio, la manipulación del material a escala micro permite superar los actuales límites en el diseño impuestos por la fabricación convencional, con piezas de geometrías, texturas y detalles imposibles de fabricar por los métodos que se utilizan en la actualidad. Esto es muy visible por ejemplo en el sector aeronáutico. Además de la aplicación al sector industrial, permitirá también estudiar el comportamiento de los materiales y servirá al desarrollo de nuevas aplicaciones, según han destacado sus impulsores.
El World Economic Forum acaba de subrayar que la fabricación mediante impresión 3D o aditiva está incluida en la lista de las diez tecnologías con mayor capacidad de mejorar nuestra calidad de vida, transformar el tejido productivo y contribuir a proteger el medio ambiente.
La innovación multiplica sus resultados cuando se produce una colaboración público privada. Es lo que ha pasado con la máquina ADD+PROCESS, que puede acabar revolucionando la industria y el mundo del diseño y la fabricación. Esta máquina es capaz de fabricar prototipos y piezas de grandes dimensiones y de reparar piezas de alto valor para sectores como el de la automoción, el aeronáutico, la máquina-herramienta o el sector energético.
El mecanizado de piezas obtenidas por procesos de adición, en la misma máquina, es una tecnología emergente que se está haciendo un hueco en la actualidad. Esta máquina se convierte en un centro autónomo de producción en el que desde cero se obtiene ya una pieza terminada, un ejemplo de I+D+i aplicada a la industria.