Los llamamientos institucionales han sido baldíos. Sin ni siquiera disputarse el partido, la final de la Copa del Rey que enfrenta a Athletic Club de Bilbao y Real Sociedad ya ha generado aglomeraciones. Centenares o incluso miles de personas se han reunido en la mañana de este Jueves Santo en Lezama para despedir a la expedición rojiblanca a Sevilla desoyendo las recomendaciones para evitar reuniones y contactos sociales en pleno repunte de la COVID-19 en Euskadi, que está viviendo su quinto pico en una pandemia que se ha cobrado más de 4.000 vidas, según se conoció este miércoles.
Aunque el grueso de los presentes llevaba mascarillas, no se han respetado las distancias ni los límites en las agrupaciones, y se han proferido cánticos a gran volumen. Todos esos factores incrementan el riesgo de transmisión del coronavirus. Fuentes de la Ertzaintza, que tenía activado de cara a esta Semana Santa un “dispositivo especial” para evitar incumplimientos de la normativa sanitaria, han indicado a este periódico que no se ha realizado “ninguna actuación” en las instalaciones del Athletic, aunque un vídeo del club sí que muestra que al menos había dos dotaciones en la zona. Se da la circunstancia de que en Bizkaia también se han visto estos días otras aglomeraciones en playas y transportes públicos. Ya hubo que atajar desde el Ministerio de Sanidad y desde el Gobierno vasco un intentó de la Federación Española de Fútbol de que el partido se jugara con público en las gradas de La Cartuja.
La expedición ha viajado en autobús hasta el aeropuerto de Loiu. Por el camino sí ha habido otros aficionados que han despedido al equipo desde el lateral de la carretera cumpliendo las medidas. El club les ha agradecido el gesto en Twitter pero no ha mencionado en ningún momento lo ocurrido en la salida de Lezama. En un mensaje genérico, ha señalado: “Sabemos que es complicado con estas emociones pero, por favor, respetemos todas las medidas de seguridad”.
El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) reunió esta semana a jugadores de ambos clubes y a sanitarios de primera línea para pedir a las aficiones a través de un vídeo que animaran con el “corazón” pero actuando con “cabeza”. La consejera Gotzone Sagardui, ella misma muy futbolera, lleva días clamando por que los seguidores celebren la Copa del Rey en sus domicilios y respetando las burbujas y restricciones establecidas. Es el mismo mensaje que han lanzado los alcaldes de Donostia, Eneko Goia, y de Bilbao, Juan María Aburto. El temor a que se produzcan celebraciones no es infundado, ya que se produjeron en enero cuando el Athletic ganó la Supercopa o en el verano del pasado año en Vitoria cuando el Baskonia se proclamó campeón de Liga.
En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación. También tenemos mapas con los brotes más destacados.
elDiario.es/Euskadi
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