Euskadi se aproxima a la alerta naranja por alta transmisión del coronavirus tras notificar otros 535 casos

El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) ha notificado este viernes 535 nuevos casos de COVID-19 en Euskadi -en la línea de las jornadas anteriores y un escalón por encima de la situación previa a Navidad pero lejos aún del máximo de 1.547- y una positividad del 7,1% en relación al total de pruebas PCR y de antígenos realizadas -claramente por encima de los estándares de seguridad-. El 32,4% de los positivos son pacientes sintomáticos y las franjas de edad más castigadas son los jóvenes de 19 a 39 años y los mayores de 80, donde el riesgo de fallecimiento se dispara.

Los casos se reparten en 283 en Bizkaia, 170 en Gipuzkoa, 73 en Álava y 9 de fuera o sin residencia conocida. La tasa de incidencia media se sitúa en 261,08 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, con un crecimiento del 9% en una semana y aproximándose de nuevo a la alerta naranja. El máximo alcanzado en noviembre fue de 844. Gipuzkoa y Álava superan esa media vasca y, entre las capitales, Vitoria sí rebasa el umbral de 300 y se halla en mayor nivel de riesgo que Bilbao y Donostia. En el plano más local, Zumaia entra en zona roja -tasa superior a 500- mientras que otra localidad guipuzcoana, Lazkao, hace el recorrido inverso. Son cuatro los municipios de más de 5.000 habitantes en los que se ha activado el metafórico semáforo rojo, Beasain, Bermeo, Lekeitio y la mencionada Zumaia, mientras que solamente Usurbil tiene una situación óptima, con una tasa por debajo de 60.

La propia consejera de Salud, Gotzone Sagardui, ha admitido ya que pesan incertidumbres sobre la evolución de la pandemia en Euskadi en un contexto general de repuntes. El indicador más fiable para medir si el coronavirus está o no en expansión es el R0, que muestra los contagios que origina cada positivo. Se halla en 1,08, lo que supone que cada enfermo multiplica el virus. No obstante, en Gipuzkoa y Álava está en el entorno de seguridad o incluso un poco por debajo de 1 (1,01 y 0,99, respectivamente), mientras que en Bizkaia está mucho más alto (1,16).

En cuanto a la situación hospitalaria, Euskadi lleva meses sin bajar del escenario de alerta 3 de 5. Son 359 las personas hospitalizadas, 46 de ellas en las últimas 24 horas. La media diaria de ingresos sigue creciendo desde el inicio de 2021. En la UCI hay 71 pacientes en estado crítico. Un posible repunte podría golpear al sistema sanitario sin que se haya superado el impacto del pico de la segunda ola de finales de noviembre.

En cuanto a las restricciones, este viernes se ha vuelto a reunir la comisión técnica que asesora a la mesa de crisis de la emergencia sanitaria (Labi, por sus siglas en euskara). Fuentes del Gobierno han explicado al término del encuentro que los datos son “preocupantes” y que la evolución es “al alza”, a la vez “constante” y “contenida”. Los expertos se volverán a citar el lunes, cuando expira el actual paquete de restricciones. Será entonces cuando se planteen nuevas medidas para las siguientes semanas.