Euskadi recupera el ocio nocturno sin baile hasta las dos de la madrugada y reabre las sociedades gastronómicas
Hace exactamente diez meses (304 días) que el órgano conocido como Labi, que es la mesa de crisis de la emergencia sanitaria en Euskadi y es competente para endurecer o flexibilizar medidas, decretó el cierre del ocio nocturno en Euskadi por la entonces incipiente nueva ola de la pandemia. La Justicia ratificó a finales de ese mes de agosto aquellas restricciones, ya que antes había frustrado un intento anterior. Este viernes, una nueva reunión del Labi ha acordado autorizar la apertura de 'pubs' y discotecas hasta las dos de la madrugada, aunque con matices. Con muchos matices. Esos locales han de adaptarse a las características de cafeterías, bares y restaurantes, esto es, sin pista de baile (licencias 1 y 2, no 3 y 4). También se ha ampliado el horario general de la hostelería, hasta ahora limitada hasta la medianoche. Con todo, la novedad más importante del día no ha partido del Labi sino del Gobierno central: desde el 26 de junio se relajará el uso de mascarillas en la calle.
“El ocio nocturno está abierto. Los establecimientos que rigen conforme a los grupos 1 y 2 y cumplan con los permisos municipales. En adelante veremos si los de los grupos 3 y 4 son susceptibles de ser abiertos. Son muchos los establecimientos de ocio nocturno que se han adaptado”, ha enfatizado el lehendakari, Iñigo Urkullu, en la presentación de las medidas. Además, se ha agarrado a la tendencia positiva para explicar que se haya ido más allá de los prometido y que el horario general de cierre no sea a las 01.00 horas y sí finalmente a las 02.00 horas. En todo caso, ha apelado a ser “más estrictos” en el cumplimiento de las medidas que el verano pasado: “Seguimos en pandemia, seguimos con el coronavirus. No estamos exentos de riesgos, y menos en este momento en el que se puede dar una mayor interacción”. Ha mencionado como factores de riesgo la variante delta (originada en India) y situaciones como los repuntes en Reino Unido o Lisboa.
Finalmente, las medidas entrarán en vigor este mismo sábado coincidiendo con su publicación en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV), por lo que afectarán al fin de semana. Ha habido un cambio de criterio, ya que la decisión inicial era que entraran en vigor a partir del lunes. Según ha indicado el lehendakari, “este nuevo paso” será revisado “en un período máximo de entre 15 y 20 días”. “El objetivo de este plazo es confirmar que la tendencia en la incidencia de contagios y en la presión hospitalaria sigue a la baja. Si se cumplen estos objetivos, será de aplicación un nuevo paso en la modulación de medidas o incluso la desactivación de la emergencia sanitaria”, ha explicado Iñigo Urkullu.
El Labi de este viernes -junto a la noticia sobre las mascarillas- ha supuesto la mayor desescalada desde aquellos ya lejanos días de agosto en que se decretó la segunda emergencia sanitaria, si bien desde que acabó el estado de alarma el 9 de mayo contra el criterio del lehendakari, Iñigo Urkullu, las medidas se han ido suavizando poco a poco. En realidad, el grueso de las medidas que se han modificado ya habían sido anunciadas el 31 de mayo, cuando se aprobó el decreto todavía en vigor. Urkullu enumeró entonces nueve puntos que se tocarían cuando la incidencia bajase de 150 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días. Esto se ha producido esta semana y, de hecho, ese indicador de contagios marca ahora 125. La UCI también ha pasado de un nivel de alerta 3 sobre 5 a 2 sobre 5 y la ocupación hospitalaria nunca había sido tan baja desde agosto. Otro dato revelador: solamente hay un municipio (de 251) en alerta roja por alta transmisión comunitaria (tasa por encima de 400) mientras que son 106 los que no acreditan ningún caso activo en este momento.
Pese a los cambios horarios, en hostelería no se toca la prohibición de consumo en barra o el aforo del 50% en interiores. Sí se permiten mesas de seis personas y no de cuatro, como hasta ahora. En cuanto a los 'txokos', que llevaban meses cerrados, tendrán normas similares a las de los bares, con aforo al 50% y hasta las dos de la madrugada. Pero se les obligará a tener un “registro diario de reservas de mesa”. Rigen estas mismas medidas en los locales de juego. Y hay otras. Por ejemplo, se pasa al aforo del 60% en eventos sociales y culturales así como para centros de culto y se permite el público en eventos deportivos -y de otro tipo- con hasta el 30% de espectadores si el recinto tiene más de 5.000 asientos, de hasta 800 en interior y 1.200 en exterior para recintos de entre 1.600 y 5.000 personas y de 600 y 800, respectivamente, en los más pequeños. Con el adelanto al sábado de la entrada en vigor de las medidas, se podrá disputar con público la final del manomanista de pelota.
En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación. También tenemos mapas con los brotes más destacados.
0