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Un fallecido, 14 focos y 51 positivos: el peor momento en las residencias vascas desde que se completó la vacunación

La residencia Albertia Campus de Vitoria

Iker Rioja Andueza

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Hace meses que en el mapa de focos de COVID-19 en residencias de mayores de Euskadi no había tantos puntos rojos. Desde que se completó la vacunación no se había registrado un número tal elevado de brotes diferentes, aunque en estas semanas ha habido casos aislados prácticamente en todo momento e incluso esporádicamente alguna defunción. Con la mayor transmisión comunitaria de toda la pandemia en la calle y una tasa en mayores de 65 años en 232,22 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, el último balance en el arranque de este mes de agosto arroja un fallecido en la residencia Albertia Campus de Vitoria -el segundo en poco tiempo en el mismo centro-, catorce focos -uno en Álava, cinco en Gipuzkoa y ocho en Bizkaia- y un total de 51 casos activos, un nivel similar al de finales de febrero.

El fallecimiento se ha producido en una residencia de Vitoria que vivió la pasada semana un rebrote de tres positivos tras un foco más amplio con 29 casos ocurrido en junio. En aquella ocasión murió una persona entre los 22 usuarios que contrajeron el Sars-Cov-2, a los que se sumaron siete gerocultores. Ahora este deceso se ha dado en una persona vacunada con la pauta completa y a causa de la COVID-19, aunque tenía otras patologías previas. Los otros dos contagiados ya han sido dados de alta. En Álava sí se ha declarado otro foco con tres mayores infectados en la residencia Nuestra Señora de Ocón de Bernedo, que registró ese mismo número de positivos en otro momento de la pandemia. Fuentes de la Diputación de Álava indican que están “vacunados y asintomáticos”. Matizan que los datos están “abiertos” ya que no están todos los resultados del cribado completo que se ha hecho. No hay casos diagnosticados entre la plantilla hasta el momento.

En Gipuzkoa los focos activos son cinco, con 20 casos en total. El de Aldakonea de Donostia llegó a tener 13 contagiados (11 mayores y 2 profesionales) y las sucesivas altas han supuesto que únicamente cuatro personas sigan en cuarentena. En el centro Inmaculada de Irún quedan sin recuperar dos de los tres casos que se confirmaron. Los brotes más recientes se han dado en Petra Lekuona de Oiartzun (4 casos que siguen a un positivo que hubo en la ola de noviembre), en Santiago de Villabona (un único positivo, el primero de toda la pandemia) y, sobre todo, en Fraisoro de la vecina Zizurkil (9 contagiados). Todos los afectados estaban vacunados. De ellos, solamente uno ha acabado hospitalizado y el resto, por precaución y para garantizar un aislamiento adecuado, ha sido aislado en una planta sociosanitaria del hospital de Eibar que en otras oleadas ha servido también como centro de referencia.

A diferencia de Álava y Gipuzkoa, que sí hacen públicos aún los partes de residencias, Bizkaia dejó de hacerlo cuando la vacunación casi llevó a cero la incidencia en estas instalaciones. Sin embargo, fuentes de la Diputación han confirmado a este periódico que tienen también casos. En concreto, están repartidos en ocho residencias del territorio. En total, son 28 los contagiados, 25 de los cuales están asintomáticos y guardando la cuarentena en sus centros. Los otros tres sí han precisado atención hospitalaria.

Son más de 8.000 los casos totales que se han ido acumulando en estos centros desde que el de Sanitas en el barrio vitoriano de San Martín fuera el primero de España en entrar en cuarentena a principios de marzo de 2020. Las muertes -aunque no hay una estadística oficial- rondarían las 1.060. No llegan a la decena las registradas desde que se generalizó la vacunación.

Según la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, se mantiene la “máxima atención” en cuanto al seguimiento de estos centros, aunque preferido hablar de “casos” y no de “brotes”, aunque históricamente se había considerado ya foco un solo caso en estos puntos por la especial vulnerabilidad de los afectados. “En las residencias siguen vigentes todos los protocolos. Nunca se han quitado”, inciden fuentes de las residencias, que destacan la importancia de la vacunación para que una oleada como la actual, protagonizada además por una nueva variante del coronavirus como es delta, haya tenido un efecto mucho más limitado.

Entretanto, el diputado general de Álava, Ramiro González, ha abierto el debate sobre la vacunación obligatoria del personal de estos recursos. Algunos brotes se han extendido por los contagios de trabajadores no protegidos. “Los que no quieran vacunarse no deberían trabajar en contacto con personas de riesgo”, ha deslizado González. Y ha apostillado: “Tendría que ser posible legalmente”.

En nuestros especiales interactivos, se pueden consultar todos los datos sobre la evolución de la pandemia en Euskadi, sobre los positivos y fallecidos en todas y cada una de las residencias de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa y el avance día a día de la campaña de vacunación. También tenemos mapas con los brotes más destacados.

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