Prado Ayuso se estrena con una “caricia” a la clase política en su primer San Ignacio como obispo guipuzcoano

El obispo de San Sebastián, Fernando Prado Ayuso, ha pedido en su primera homilía en Loiola con motivo de San Ignacio tras relevar a José Ignacio Munilla, “una caricia” para la clase política. “Ya os damos bastantes palos, y tantas veces inmerecidos”, ha señalado el nuevo prelado, quien ha ponderado la “entrega para que la vida de los demás sea mejor” de los dirigentes institucionales. “Un día, sin duda, hicisteis la noble elección de servir al bien común y queréis manteneros en ella. A veces nos olvidamos y no acertamos a agradeceros suficientemente vuestro afán y vuestro sacrificio personal, tantas veces lleno de sinsabores e incomprensiones”, ha afirmado.

Una amplia representación política encabezada por el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha escuchado este discurso. Ha acudido acompañado de su esposa, Lucía Arieta-Araunabeña. Ha estado presente igualmente la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria, la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, o los consejeros Jokin Bildarratz, Arantxa Tapia o Gotzone Sagardui. Asimismo, han participado el presidente de las Juntas Generales, Xabier Ezeizabarrena, o el líder de los socialistas guipuzcoanos y diputado foral José Ignacio Asensio. La mayoría llevaba colgando medallones dorados.

Prado Ayuso, ya centrado en Gipuzkoa, ha señalado también hay “grandes cosas” de las que “enorgullecerse”. “Hemos llegado a tener casi el pleno empleo y podemos enorgullecernos de grandes y novedosos proyectos, como el Basque Culinary Center, o de ser anfitriones de etapas gloriosas del Tour”, ha apuntado. Sin embargo, ha considerado que “todavía hay mucho que hacer y soñar” y ha recordado que “hay muchas personas que todavía no pueden disfrutar de ese bienestar y se ven excluidas irremediablemente”. Asimismo, ha indicado:  “Vivimos tiempos de polarización y de acentuación de las diferencias, por encima de aquello que nos une. Quisiera que nos invitáramos todos a hacer un sereno ejercicio y mirar con algo más de profundidad la realidad”. El “diálogo” tiene que emergen en tiempos de “bloqueo”, se ha permitido continuar.