El Servicio Vasco de Salud (Osakidetza) constata que “continúa aumentando” todavía más la circulación de infecciones respiratorias como la gripe A o la COVID-19, incluso también una antigua patología como la tos ferina. Los casos de bronquiolitis, en cambio, presentan dos semanas de tendencia descendente. En este contexto, que está implicando también un tensionamiento de la atención primaria, de los PAC, de las Urgencias y de los hospitales, las autoridades sanitarias vascas han lanzado ya el segundo aviso en menos de una semana para recomendar el uso de mascarillas.
“Las festividades navideñas de reunión con familiares y amigos favorecen la transmisión de infecciones respiratorias. Es por ello que el Departamento de Salud y Osakidetza recomiendan una vez más el uso de la mascarilla ante síntomas respiratorios para protegerse a uno mismo y a las personas que nos rodean. Asimismo, ante el riesgo de contagio, se sugiere mantener distanciamiento físico en espacios concurridos, reforzar la higiene de manos, cubrir la boca y nariz al toser y estornudar y ventilar espacios”, indica Osakidetza en una nota muy similar a las que se emitían en las sucesivas olas de la pandemia. “La prevención de infecciones respiratorias sigue siendo una responsabilidad compartida entre todos -abunda Osakidetza-- La combinación de múltiples estrategias, incluyendo el uso de mascarillas, contribuye significativamente a reducir la transmisión de virus en la comunidad. La adherencia a estas recomendaciones es clave para salvaguardar la salud pública”.
El informe semanal sobre la situación de las enfermedades respiratorias -la herramienta de monitorización mediante estimaciones desde que se acabó el seguimiento preciso de la COVID-19- apunta a una tasa acumulada de todas las patologías respiratorias de 555 casos por cada 100.000 habitantes. En realidad es inferior a los 578 de la semana anterior, pero es el efecto de la brusca caída de la bronquiolitis, ya que los virus del Sars-Cov-2 (coronavirus) e influenza (gripe) siguen subiendo. De hecho, eso se nota en que hay un 50% más de ingresados por casos “graves”, ya que la tasa ha pasado de 20 a casi 30 hospitalizados por cada 100.000 habitantes. En números absolutos, podría haber del orden de 700 camas ocupadas. En los últimos días sí es público que han entrado 96 ingresos de COVID-19. El 86% es mayor de 60 años.
“Las Urgencias de Osakidetza están atendiendo al habitual incremento de la demanda asistencia en este periodo del año, provocada por el aumento de la incidencia de infecciones respiratorias en Euskadi. Para dar respuesta a esta situación, las organizaciones sanitarias cuentan con planes de contingencia que, entre otras medidas, prevén un aumento de camas para pacientes con síntomas respiratorios cuando sea necesario”, señala Osakidetza. Y abunda: “Además, hay que recordar la importancia de la vacunación para prevenir enfermedades respiratorias en esta época. Este año, se han administrado en el conjunto de organizaciones de Osakidetza 507.432 dosis de vacuna antigripal y 391.261 dosis frente a la COVID-19. Esta cifra supone un descenso del 3% en el número total de dosis de vacuna antigripal administradas con respecto al mismo periodo de la campaña 2022”. Hay 19 residencias con focos de coronavirus, cuatro más que hace una semana.
En cuanto a la gripe, la variante A continúa siendo la más extendida. De 935 muestras analizadas 680 han sido de A sin más datos y 215 de la A que causó la pandemia en 2009. Desde hace tres meses se han revisado 2.707 muestras y el 99,6% son de A. Cuando se hacen análisis más precisos se ve que el 84% corresponde a la A H1N1 de la emergencia sanitaria mundial de hace quince años. Y, en lo tocante a la COVID-19, cuando se cumplen cuatro años de su surgimiento, Osakidetza informa de que “se han secuenciado hasta el momento el 53,5% de las muestras positivas” y “todas fueron variante ómicron, siendo los linajes más frecuentes JN.1 (22,8%), JD.1.1 (14,7%), EG.5.1 (11,2%) y BA.2.86 (9,1%)”. Según ha informado la Cadena Ser, asimismo, se ha enviado una alerta a colegios de Bizkaia ante la vuelta a las aulas de la próxima semana por posibles riesgos asociados a la tos ferina.