Las tres diputaciones vascas aplazan impuestos y ofrecen ayudas que sumarán 165 millones de euros

Las Haciendas vascas han aprobado un paquete de medidas de “urgencia” ante una situación que han calificado de “excepcional”. Se trata de un paquete de medidas de carácter fiscal que pueden sumar unos 165 millones de euros de merma de recaudación para las arcas forales, aunque han reconocido que es difícil prever en estos momentos cuál será la cuantía exacta de las medidas. De ese montante, 5,4 millones están destinadas a ayudas directas para el sector primario. El resto se reparten en aplazamientos de pagos de IRPF y Sociedades, unos 120 millones de euros, y reducciones de la base imponible que supondrán unos 40 millones de euros.

Las medidas las han presentado de forma conjunta los tres diputados generales de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, con el fin de paliar los efectos de la guerra de Ucrania en autónomos y empresas, que podrán aplazar impuestos de IRPF y Sociedades sin intereses ni garantías, y pagarlo después en plazos de seis meses. Además las personas físicas que realizan actividades económicas no tendrán que autoliquidar e ingresar los pagos fraccionados del IRPF en los dos primeros meses del año.

Por último, las medidas fiscales suponen una ampliación del forfait de compensación de gastos con el que microempresas y autónomos pueden reducir su base imponible de IRPF o Sociedades. Esta ampliación será sobre todo para actividades de transporte por carretera, agrícola y ganadero, ya que se elevará ese forfait hasta el 70%, mientras que el general, tanto para autónomos como para microempresas se eleva al 15%.

Los tres diputados generales han dado solemnidad a la presentación de unas ayudas en las que se quedan fuera las familias y también las grandes empresas. Han recordado que las competencias de las Haciendas forales son limitadas, pero que el momento precisa de medidas de urgencia. De hecho, en una especie de carrera entre las instituciones para anunciar medidas, las Haciendas forales han hecho públicas las suyas el mismo día en que el Consejo de Ministras de Pedro Sánchez hace públicas las del Gobierno central y cuando el Gobierno vasco quiere reunirse con los partidos para tratar la situación de crisis.

El diputado general de Álava, Ramiro González, tras recordar que la competencia de las Haciendas es la “fiscalidad”, ha señalado que “haremos lo que sea necesario en el ámbito de nuestras competencias. Es imprescindible para ayudar a nuestro tejido productivo” para “mantener el empleo y la cohesión social”. Unai Rementeria, diputado general de Bizkaia, ha puesto en valor que “los recursos seguirán en manos de quien mas lo necesita cuando más lo necesita”, mientras que Markel Olano, diputado general de Gipuzkoa, ha destacado la colaboración entre los territorios para adoptar medidas conjuntas.

En sus intervenciones, los responsables de las Diputaciones han destacado que la guerra ha dado al traste con todas las previsiones que se tenían en mente y que auguraban la salida de la crisis de la COVID-19. De hecho, el Gobierno vasco ya se ha visto obligado a reducir sus previsiones de crecimiento para este año y el que viene.

Las medidas se aprobarán en cada una de las diputaciones la semana que viene en Consejo de Gobierno, y entrarán en vigor de forma inmediata. Lo que no han querido adelantar es si habrá una reforma fiscal pronto, como les piden desde los partidos de la oposición: “Hay gran incertidumbre y es mejor no tomar decisiones de estructura”, ha señalado Rementeria.

Las ayudas al sector agrícola, que suman en conjunto 5,4 millones, serán más importantes en Álava, donde tiene mayor peso, 2,5 millones. En Gipuzkoa las ayudas sumarán 1,7 millones y en Bizkaia 1,2 millones de euros.