Se avecina un otoño caliente en Osakidetza. Al menos así lo han advertido los sindicatos, profundamente descontentos con la actitud del Servicio Vasco de Salud “más pendientes de seguir con los recortes que de negociar con las centrales”, denuncian los sindicatos. La creación de empleo y el desarrollo de la carrera profesional de la plantilla son las principales reivindicaciones de los trabajadores. Ambas cuestiones están sobre la mesa sectorial de sanidad, foro que reúne este lunes a la dirección de Osakidetza y a los sindicatos del sector.
Según las centrales, en los últimos cuatro años se han destruido al menos 3.000 empleos en Osakidetza. A ello hay que sumar la paralización del desarrollo de la carrera profesional (incentivos econcómicos y laborales a los trabajadores) desde 2012. Los intentos por desbloquear la situación hasta ahora no han dado ningún resultado por lo que los sindicatos han decidido mantener una unidad de acción para movilizarse. “La pelota está en el tejado de Osakidetza”, advierten los portavoces de las centrales.
“Osaskidetza está ante su última oportunidad para detener unas movilizaciones que van a ser duras”, ha destacado Peio Geregi, representante de ELA. “El conflicto va a tener consecuencias en toda la sociedad”. De momento, ya está previsto un encierro en los hospitales para este jueves y una manifestación para el 4 de octubre. El siguiente paso serán los paros.