En el cuadro que ha pintado Gema uno de los personajes se tapa los ojos con unas manos enormes porque, según su autora, “tiene miedo de las armas”. Nazaret explica que en su dibujo aparece gente muerta “porque eran pobres, y sólo querían a los ricos”. Y en la lámina de Sonia el médico es mucho más grande que el resto porque, asegura, “es el más importante de todos”. Son sus interpretaciones, respectivamente, de ‘Los fusilamientos del 3 de mayo’ de Goya, ‘La Libertad guiando al pueblo’de Delacroix y una ‘Lección de anatomía’ anónima del siglo XVIII. Estasobras son sólo algunas de las joyasque forman parte de una exposición de arte que ha logrado romper barreras.
Gema, Nazaret y Sonia pertenecen al taller de Serigrafía y Artes Gráficas de ‘Plena Inclusión 8’ (antes llamado Aprosuba), en Montijo, donde una decena de personas con capacidades intelectuales diversas (definición que creen que deben extenderse)de entre 22 y 63 años han logrado poner en pie una muestra de más 100 cuadros basados en pinturas famosas de todas las épocas. La han bautizado 'Capacitarte'.
Quien está detrás de esta iniciativa es Óscar Ruiz, el monitor del taller, que lleva trabajando con ellos en esta actividad desde 2010. “Algunos empezaron dibujando dos círculos y un triángulo y hemos conseguido que terminen haciendo composiciones muy completas y de mucha calidad”, afirma Ruiz.
Su método es contarles la historia que hay detrás de cada obra “para que ellos se queden con lo más importante”. “Cada uno ha plasmado lo que más le ha llamado la atención. Yo sólo les he dado apoyo verbal, les he ido diciendo qué les faltaba, y poco a poco han logrado terminar sus cuadros”.
Joana es otra de las artistasde esta muestra. Su cuadro favorito es ‘Anatomía de la cabeza’ de Basquiat, enla que ha reflejado “los pensamientos que todos tenemos dentro”. “Por ejemplo, si vamos de viaje, o vamos a un museo… ”. De esta obra también ha realizado su interpretación Pedro Javier: “Yo lo he hecho a mi forma y me ha resultado muy fácil”, afirma.
En la exposición habrá, igualmente, cuadros de José Antonio, que ha disfrutado mucho pintando ‘Juramento de los Horacios’, de Jacques-Louis David, porque le ha gustado que su monitor le cuente la historia que esconde esta obra: “Horacio es un rey que se va a morir y tiene que dejarle el trono a sus hijos, y ellos tienen que luchar por el trono. Por eso en el cuadro aparecen sus mujeres, que están muy tristes”, explicade nuevo a sus alumnos mientras éstos le miran con mucho entusiasmo.
De la mano de Pedro Juan habrá otra interpretación de ‘La Libertad guiando al pueblo’. Él tiene claro que “la mujer del cuadro tiene que llevar una escopeta para defenderse de los malos”.
En total, son una decena de artistas los que han creado la mayor parte de las pinturas de esta exposición, a una media de entre ocho y diez cuadros cada uno, aunque cuentan con colaboraciones de otros talleres. Pero además, ellos mismos han fabricado los marcos de sus obras con diversos palés que han cortado, lijado y pintado.
Ganas de superación
El impulsor de todo el proyecto explica que esta actividad se pone en marcha “porque se plantea la necesidad que tienen los componentes del tallerde desarrollar ciertos aspectos visuales a la hora de distribuir y centrar pegatinas en superficies textiles. No siempre salían muy derechas y costaba trabajo”. “Entonces –continúa- se me ocurrió que podíamos emplear los medios artísticos como forma de perfeccionar esta técnica de estampación. Al principio poníamos ejes centrales y transversales para que ellos pudieran centrar las imágenes principales. También marcas visuales en los exteriores para que no se salieran de los márgenes, porque ocurría a veces que empezaban a pintar algo, y cuando iban a por el siguiente objeto ya no había más sitio y teníamos que añadir otro folio”.
Tras años de trabajo y perfeccionamiento este monitor afirma orgulloso que, ahora, a la hora plasmar imágenes con la plancha textil, “son capaces de centrarlas mucho más rápido y de manera más eficiente, de modo que la calidad es mucho mejor”.
Se trataba, al fin y al cabo, “de usar la pintura como herramienta para mejorar en capacidades visuales, y no sólo para que estuvieran entretenidos”.
El resultado final es esta exposición que rezuma arte, entrega y ganas de superación.
En la misma, además de las obras ya citadas, habrá interpretaciones de ‘La fragua de Vulcano’ de Velázquez y de tres desnudos de Zabaleta, entre otros. La colección al completo estaba previsto que se inaugurara el viernes pasado, y se podrá ver en la Sala Centinela del Teatro Municipal de Montijo hasta el próximo 8 de abril.
Pero éste será sólo el primer paso, porque la intención es que la exposición visite otras ciudades y salas para mostrar que con el arte también se rompen muros.