Como documento de este mes de febrero, el Archivo Provincial presenta un oficio de Juan José Hiarte, Mayordomo de propios, a Don Rafael Menacho, Gobernador de la plaza de Badajoz.
Este documento forma parte de la serie documental “Expedientes de examen y liquidación de cuentas de propios y arbitrios”, custodiada en el Archivo Provincial y formada por un volumen de 329 cajas y 28 carpetas y 22 libros, con fechas comprendidas entre 1760 y 1835, sin que se conserve documentación de todos esos años.
Biografía del general
El 4 de marzo de 1811 caía abatido por una bala de artillería enemiga, desde donde se encontraba asomado viendo las operaciones de sus tropas, en el baluarte de Santiago, el General Rafael Menacho. La hoja de servicio del militar, que se conserva en el Archivo Militar de Segovia, dice expresamente: “La cuarta salida que , con la brecha abierta en la plaza, ejecutó el día cuatro de marzo de 1811, en la que se clavaron varias piezas al enemigo y desbaratándoles baterías. Estando sobre las murallas, disponiendo y animando sus tropas, fue muerto por una bala demetralla de cañón que le entró por el vientre, habiendo hablado en esta situación como de cinco a siete minutos, profiriendo sentía no poder ser más útil a su patria”.
Estos hechos son de sobra conocidos por el gran público que haya tenido la oportunidad de leer los libros o crónicas sobre la ciudad de Badajoz y sus memorias, o asistido al menos a algunas de las muchas conferencias sobre la historia que de este héroe badajocense, nacido en Cádiz, se hayan impartido en nuestra ciudad. Sin embargo, los documentos que presentamos este mes de febrero nos muestran una faceta nueva del personaje que nos ocupa, no de corte militar, a la que estamos acostumbrados, sino de las obligaciones que dimanaban de su cargo de gobernador de la plaza.
La fulgurante carrera militar de Menacho tuvo lugar, entre otras actuaciones, al acudir en defensa de la ayuda solicitada por el Marqués de la Romana al hallarse la ciudad sin guarnición, ante el asedio francés. Estos hechos le sirvieron a Menacho para conseguir el ascenso a Mariscal de campo y de Gobernador Político militar de la ciudad, por el Consejo de la Regencia.
Menacho no solo tenía la función de proteger estratégicamente la plaza desde el punto de vista militar, sino la de abastecer, disponer y pagar las cuentas de la ciudad. Prueba de ello, la encontramos en el documento que se muestra este mes, que quizás fuera el último firmado de su puño y letra. Probablemente en los días previos al asalto de la ciudad por parte de los tropas del General