Una vez que la Junta ha mandado esta tarde al Ministerio de Sanidad el plan para que Extremadura pase el lunes 25 a la fase 2 de reactivación, hay que esperar a que el viernes por la tarde se haga pública la decisión, un avance que supondría abrir el interior de bares y restaurantes, cines, teatros, auditorios o cafeterías de hoteles.
Seguirá prohibido viajar de una provincia a otra, algo que no se podría hacer hasta la fase 3 programada si todo sigue bien para el lunes 8 de junio.
El vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Sanidad y Política Social, José María Vergeles, ha explicado esta tarde en rueda de prensa las novedades que vendrían, y los argumentos sanitarios aportados por Extremadura, que se cree merecedora de pasar a un escalón superior del calendario de transición.
“Queremos pasar”, ha dicho, “para que haya medidas de alivio en los extremeños, una etapa en la que protegeremos a un grupo reducido de personas vulnerables, los mayores de 70 años, y habría contacto social, reuniones, de hasta 25 personas, ahora eran 10, o bodas con asistentes limitados, 50 personas o 50% del aforo en sitio cerrado, y en aire libre 100 personas”.
Los velatorios pasan de 15 personas en lugar abierto, a 25, y se recupera la actividad escolar en cursos de titulación, “con mezcla entre enseñanza presencial y online”; apertura de educación especial en condiciones pactadas con las entidades gestoras, y se podrá hacer la prueba EBAU; seminarios científicos con 50 personas y distancia de seguridad; e igualmente abren residencias para investigadores, museos de ciencia y tecnología, y casas de la ciencia
Para el comercio minorista ya no hay límite de 400 metros cuadrados, ni de aforos, y también abren los parques y centros comerciales, “pero pedimos que esas tiendas tengan un aforo máximo del 40% o entren de persona en persona, y en la zonas comunes no más del 30% de aforo; ahí contaremos con la seguridad privada, con horarios para personas vulnerables”.
Mercadillos hasta el 30% de los puestos, abren autoescuelas, academias, y en hoteles las zonas comunes con 40% del aforo, y funcionarán sus cafeterías, igual que el interior de restaurantes y cafeterías con mesas separadas.
Cines, teatros, auditorios y similares, abrirían a un tercio, igual que los monumentos (por ejemplo los recintos del consorcio monumental de Mérida), actos culturales y musicales de hasta 50 personas en cerrado y 400 en sitio abierto, y grupos más amplios de hasta 20 personas pueden realizar actividades de naturaleza.
En cultos religiosos el aforo máximo pasa de un tercio al 50%, y en empleo público “tenemos que seguir con teletrabajo y prevención”.
Argumentos
La solicitud al Ministerio de pasar las provincias de Cáceres y Badajoz a la segunda fase se basa en que “tenemos una importante red de salud”, con 133 centros y más de 400 consultorios locales, capaz de detectar brotes. “Lo importante tras confirmar un caso es seguir a esos contactos estrechos para yugular el brote en fase muy temprana”.
Hay capacidad de hacer 1.600 pruebas diagnósticas PCR diarias, que aumentarán hasta 4.000 cuando “en próximas semanas”
“Nuestros datos en atención primaria nos avalan, hemos hecho 2,246 millones de consultas entre videoconsultas, telefónicas, a demanda y programadas”. Por ejemplo 343.000, telefónicas y 2.235 con vídeo.
PCR hechas del 8 al 14 mayo, 3.749, se suman a las 28.000 anteriores: “Estamos en la media por habitante de las comunidades autónomas”
Salud, economía, responsabilidad
“Tenemos capacidad suficiente para solicitar la fase dos”, seguía Vergeles, “pero ello implica más responsabilidad porque ya hay gente en el interior de locales de ocio, hoteles, bodas, velatorios…”
El estado de la economía “mina la salud de la población, hay que compaginar ambas cosas, y para eso pedimos responsabilidad, distancia social, higiene, respetar horarios, pasillos ficticios para más vulnerables, pasamos de un confinamiento en casa a otro provincial”
“Nos jugamos el futuro socioeconómico de la región”, añadía el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Política Social.