Extremadura y Madrid firman un protocolo de colaboración pero Ayuso insiste: “Lo importante es Almaraz”

Las presidentas de Extremadura y la Comunidad de Madrid, María Guardiola e Isabel Díaz Ayuso, han firmado este lunes un protocolo de colaboración repleto de generalidades en distintas materias, pero esa ha sido la excusa que ha llevado a la dirigente extremeña a Mérida durante una visita de dos días. “Lo importante” es la continuidad de la central nuclear de Almaraz.

La “cumbre” entre ambos gobiernos autonómicos está motivada por el cierre de las instalaciones cacereñas, que actualmente aportan el 15% de la energía que consumen las familias y empresas madrileñas, según los datos de Ayuso, cuyo primer reactor se apagará en 2027 y el segundo al año siguiente. Pero las próximas semanas son esenciales si se prorrogara la vida útil de Almaraz.

La dirigente madrileña ha ensalzado la energía nuclear y ha subrayado la “importancia” para la economía de España, por lo que ha arremetido contra la política energética del Gobierno, a pesar de que el calendario de cierre de las centrales fue consensuado con las compañías eléctricas que las explotan. A su juicio, el abandono de esta energía, obedece a una “campaña trasnochada” y a una “ideología totalitarista”.

Tanto Ayuso como Guardiola han puesto el foco en los impuestos que tienen que pagar las empresas que operan las centrales nucleares“, que el Gobierno de Sánchez ha aumentado ”un 70%“, aunque en realidad se trata de una tasa para que sean las eléctricas las que costeen la gestión de los residuos radiactivos y el desmantelamiento de sus instalaciones.

En el caso de Extremadura, las compañías también pagan la ecotasa, que grava las instalaciones que inciden en el medio ambiente. Este año abonarán a las arcas autonómicas alrededor de 90 millones de euros, pero María Guardiola ha rechazado eliminar o rebajarlo. Al ser cuestionada por ello, la dirigente extremeña ha dicho que se intenta “despistar” con ese debate, pero ha vuelto a acusar al Gobierno de “asfixiar” a las empresas y que la región lo estudiará “cuando lo haga el Gobierno de España y Cataluña”.

El viaje de Ayuso a Extremadura concluirá este martes con una visita a la central nuclear de Almaraz, pero en la tarde de este lunes estará en Trujillo, cuna del conquistador Francisco Pizarro, porque uno de los ámbitos en los que los dos Ejecutivos autonómicos se han propuesta colaborar es en la defensa y promoción de Hispanoamérica.

El protocolo también recoge actuaciones en materia sanitaria, educativa, política empresarial, de investigación, dependencia y agrícola y ganadera. Ante ello, Guardiola ha advertido que Extremadura “copiará todo lo que hace la Comunidad de Madrid”.

Ambas presidentas también han firmado una declaración que exige que el tren de alta velocidad entre Badajoz y Madrid esté en 2030, coincidiendo con los plazos del Gobierno.